El Alto Comisionado de la ONU sobre Derechos Humanos, Zaid Ra´ad al Hussein, condenó el viernes al gobierno saudí por atacar un mercado yemení el martes en Mustaba, al noroeste de Yemen.

El Alto Comisionado de la ONU sobre Derechos Humanos, Zaid Ra´ad al Hussein, condenó el viernes al gobierno saudí por atacar un mercado yemení el martes en Mustaba, al noroeste de Yemen, que causó la muerte a 119 civiles. Él señaló que tal acción equivale a un crimen de guerra u otro “crimen internacional”.

Hussein señaló que los ataques saudíes causan un gran número de muertos civiles en la actual guerra de Yemen.

“Ellos han atacado mercados, hospitales, clínicas, escuelas, fábricas, celebraciones de boda y cientos de viviendas civiles”, indicó Hussein, que añadió que “estos terribles incidentes continúan ocurriendo con regularidad”.

Responsables de la ONU han criticado de manera repetida los crímenes cometidos por Arabia Saudí, pero hasta ahora las objeciones saudíes han logrado bloquear las investigaciones por crímenes de guerra y han llevado al resultado irracional de permitir que los saudíes y sus aliados se investiguen a sí mismos.

Más de 6.000 personas, en su mayoría civiles, han muerto desde que la campaña saudí en Yemen dio comienzo el 26 de Marzo de 2015.

El viernes, el portavoz de la coalición, general de brigada Ahmed al Asseri, dijo que Riad ponía fin a las grandes operaciones en Yemen y dijo que había “buenas indicaciones” de que la ONU podría reanudar pronto las conversaciones de paz entre partes yemeníes.

Este mes se produjeron conversaciones secretas de responsables de Ansarulá en Arabia Saudí que dieron lugar a una tregua en la frontera y a un intercambio de prisioneros.

Arabia Saudí ha sido denunciada por la ONU y por varias organizaciones pro-derechos humanos como responsable de la comisión de crímenes de guerra, crímenes contra la humanidad y graves violaciones de los derechos humanos en Yemen.

Sin embargo, EEUU y el Reino Unido han mantenido su apoyo a la campaña saudí y, según diversas informaciones, colaboran también en la selección de los blancos de los ataques aéreos saudíes. Pese a ello, la Administración Obama ha señalado que está “profundamente preocupada” por la enorme cantidad de muertos en Yemen y ha pedido medidas para “minimizar los daños a civiles”.