El sitio Atlantico ha dado a conocer una encuesta en la que se buscaba evaluar la opinión de los franceses en relación al Islam y la comunidad musulmana tras el atentado de Charlie Hebdo.

El sitio Atlantico ha dado a conocer una encuesta en la que se buscaba evaluar la opinión de los franceses en relación al Islam y la comunidad musulmana tras el atentado de Charlie Hebdo.

Aunque la actuación de grupos islamófobos y de algunos medios que siguen esta línea permitía pensar en la existencia de un panorama sombrío, los resultados no fueron tan malos como se preveía. De hecho, un 66% de los entrevistados han afirmado que rechazan todas las amalgamas y creen que la mayoría de los musulmanes viven apaciblemente en Francia, frente al 29% que piensa lo contrario.

Esto permite ver la existencia de un notable sentido de discernimiento de los franceses en general que contrasta felizmente con las predicciones alarmistas. Ello muestra también que la mayoría de los franceses han preferido la unión nacional a la polémica nacional y el rechazo a los prejuicios a los mensajes de odio de círculos extremistas.

Por partidos, la izquierda abandera el rechazo a los perjuicios y la islamofobia. El 82% de los votantes del Frente de Izquierda y el 84% de los del Partido Socialista rechazan los prejuicios frente al 16% y 15% respectivamente que ven a la religión del Islam como un problema.

En la derecha (UMP) el 63% de los votantes rechazan las almagamas, un porcentaje cerca de la media.

Es, sin embargo, en el Frente Nacional de Marine Le Pen, donde las expresiones islamófobas tienen su mayor eco. El 66% de los seguidores de este partido ven a la segunda religión de Francia y a sus seguidores como una amenaza.

Otro dato a destacar es que el rechazo a la amalgama entre Islam y terrorismo es mayor en las grandes ciudades (77% en la región de París) y entre los miembros de profesionales liberales (75%), lo que demuestra que la islamofobia decrece con la mayor cultura y educación.

Estos porcentajes descienden hasta el 60% en las comunas rurales y entre los obreros.