El grupo Unidos contra Un Irán Nuclear (UANI), una organización controlada en gran parte por el multimillonario sionista Sheldon Adelso ha lanzado una campaña mediática contra el acuerdo nuclear.
El pasado 30 de Junio, cuando finalizó el primer plazo fijado para las negociaciones con Irán, el grupo estadounidense Unidos contra Un Irán Nuclear (UANI), una organización controlada en gran parte por el multimillonario sionista Sheldon Adelson, uno de los reyes de los casinos de Las Vegas, lanzó una campaña mediática dirigida a sabotear el acuerdo que ya se perfilaba.
Adelson es un decidido partidario del primer ministro israelí Benyamin Netanyahu y financia al periódico israelí Israel Hayom, que apoya al actual primer ministro y es conocido en Israel como “el periódico de Bibi”. Su esposa Mariam y su hija han servido en el Ejército israelí. Él y los miembros de su familia poseen la nacionalidad israelí.
La campaña contra el acuerdo con Irán ha atraído el apoyo de otros donantes judíos. Ella advierte a los negociadores en contra de hacer “peligrosas concesiones”, según Gary Samore, presidente de la UANI y antiguo Coordinador de la Administración Obama para Temas de Control de Armas.
El UANI ha sido uno de los más activos en la diseminación de una burda propaganda anti-iraní. Él ha afirmado, sin disponer por supuesto de ninguna evidencia, que Irán está buscando fabricar armas nucleares o que fue el responsable de la muerte de “miles de muertes de soldados estadounidenses” durante la ocupación norteamericana de Iraq.
Adelson es también un financiador de otro grupo extremista, la Fundación para la Defensa de las Democracias (FDD), que recibió 1,5 millones de dólares de Adelson y cuyos “expertos” han abogado también por una campaña de ataques militares contra Irán.
Ataque nuclear contra Irán
El millonario sionista ha hecho repetido llamamientos en los que pedía que EEUU ataque unilateralmente Irán. En octubre de 2013, él dijo a unos estudiantes de la Universidad Yeshiva que EEUU debería lanzar un “ataque nuclear preventivo” contra zonas del desierto iraní y amenazar con “borrar a Irán del mapa” sino no desmantelaba su programa nuclear.
Él ha estado presionando también a varias grandes compañías estadounidenses para que firmen una promesa para no establecer relaciones comerciales con Irán bajo ninguna circunstancia. Algunas grandes corporaciones rechazaron, sin embargo, este intento en un momento ya en que prevén la expansión de sus negocios hacia Irán.
Influencia en el Partido Republicano
Algunos congresistas republicanos han apoyado esta campaña de Adelson esperando, sin duda, los generosos donativos de este último para sus campañas. Adelson invirtió en las elecciones de 2012 98 millones de dólares de su fortuna personal para oponerse a la reelección de Obama.
No cabe duda de que una gran parte de los candidatos republicanos comparten la ideología de Adelson. El halcón senador Lindsey Graham (Republicano por Carolina del Sur) prometió que seguiría “el liderazgo de Netanyahu” y bromeó sobre “el establecer el primer gobierno estadounidense constituido sólo por judíos” si es elegido presidente. Más recientemente, Graham afirmó que el acuerdo nuclear con Irán “equivale a una declaración de guerra a Israel”.
Jeb Bush, un candidato republicano a la Casa Blanca, recibió una indignada queja de Andelson después de que el antiguo secretario de Estado de su padre, James Baker, criticara a Netanyahu en un encuentro del grupo liberal judío J. Street, que apoya el acuerdo con Irán. Otro candidato, el senador Marco Rubio (Republicano por Florida), que es considerado como uno de los favoritos de Adelson debido a sus diatribas anti-iraníes. calificó recientemente el acuerdo con Irán de “amenaza a nuestra seguridad nacional”.
El senador Ted Cruz (Republicano por Texas) calificó, por su parte, el acuerdo de “traición a EEUU” y a nuestros más cercanos aliados, sobre todo y en primer lugar Israel”. No cabe duda de que la “generosidad” de Adelson puede tener mucho que ver con las profesiones de fe anti-iraníes y pro-israelíes de muchos de estos candidatos.
No obstante, el origen de su fortuna a partir del juego y los casinos y su rechazo a una postura de hostilidad hacia China, debido a sus intereses en algunos casinos de Macao, han llevado a generar una desconfianza hacia Adelson en varios políticos republicanos, que se inquietan de ver una excesiva influencia de este personaje en el ámbito de la política norteamericana.