Abdul-Qadir Azzuz, asesor del primer ministro sirio, declaró el martes que un ataque militar de Turquía contra Siria, significaría el suicidio político de las autoridades turcas

Abdul-Qadir Azzuz, asesor del primer ministro sirio, declaró el martes que un ataque militar de Turquía contra Siria, significaría el suicidio político de las autoridades turcas, además de una violación de la soberanía .

En una entrevista concedida a la cadena de televisión Russia Al-Youm, Azzuz dijo que en caso de que el gobierno de Ankara intente ocupar el suelo sirio, las autoridades de Damasco tendrán el derecho a adoptar cualquier método que considere oportuno para responder la agresión.

El asesor del primer ministro sirio recalcó que el sueño del presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, es dominar la provincia de Alepo, al noroeste de Siria, quien para alcanzar su objetivo ha urdido hasta el momento varias conspiraciones.

Las declaraciones de Azzuz se producen después que tanques turcos bombardearon la localidad siria de Zur Maghar, bajo control de las milicias sirio-kurdas conocidas como Unidades de Protección del Pueblo (YPG).

Según un comunicado emitido por las YPG, el fuego de los tanques turcos hirió a cuatro de sus integrantes y a varios habitantes de la localidad.

Desde el viernes último, fuerzas del ejército y la aviación militar de Turquía iniciaron una ola de bombardeos contra territorio sirio, sin autorización de las autoridades de Damasco, bajo el pretexto de combatir asentamientos del grupo terrorista Estado Islámico (EI).

En criterio de algunos líderes de la oposición turca, Erdogan busca crear un estado guerra que le permita frustrar la formación de un nuevo gobierno, después del fracaso de su partido en las recientes elecciones.

El copresidente del Partido Democrático de los Pueblos (HDP), Selahattin Demirtas, acusó la víspera a Erdogan de estar llevando a Turquía a la guerra civil, para de esa forma perpetuarse en el poder.

Por su parte, el socialdemócrata Kemal Kiliçdaroglu, líder de la oposición turca, afirmó que el presidente Erdogan está jugando con el futuro de Turquía y que el Partido de la Justicia y el Desarrollo (AKP) -en el poder- intenta hacer fracasar las negociaciones para formar Gobierno.

PL