El rey de Arabia Saudí,Salam bin Abdul Aziz al Saúd, abandonó el domingo inesperadamente la Costa Azul francesa tras la decisión de las autoridades locales de reabrir el pasado lunes una playa pública
El rey de Arabia Saudí, Salam bin Abdul Aziz al Saúd, abandonó el domingo inesperadamente la Costa Azul francesa tras la decisión de las autoridades locales de reabrir el pasado lunes una playa pública, situada cerca de su residencia privada, que había sido cerrada para su disfrute exclusivo. La villa real tiene una extensión de un kilómetro de largo y cuenta con un helipuerto, un centro médico y una gran piscina. .
Tras haber pasado sólo ocho días de vacaciones en su villa real, en el municipio de Vallauris, el monarca saudí se dirigió el domingo al aeropuerto de Niza para coger un vuelo destinado a Tánger, en Marruecos, indicó el subprefecto del Departamento de los Alpes Marítimos, Philippe Castanet, a AFP.
El soberano tenía planes en principio para permanecer en Francia durante un mes, entre el 20 de Julio y el 20 de Agosto, según la embajada del reino saudí en París.
Una gran parte de su entorno ha acompañado al rey en su viaje a Marruecos. Al menos la mitad de los saudíes residentes en Cannes abandonaron el país al mismo tiempo que él. El número total de miembros del entorno del rey ronda el millar de personas.
Esta presencia del monarca saudí suscitó una gran polémica en Francia, en especial en lo que respecta al acceso a litoral de la villa real y la prohibición al público de la entrada en la playa adyacente con el pretexto de la seguridad.
La partida del rey saudí coincidió con la decisión de las autoridades locales de reabrir el lunes la playa pública situada al pie de la villa, según indicó la alcaldesa de Vallauris, Michelle Salucki.
De hecho, los residentes se movilizaron y fue lanzada una petición en línea en contra del cierre de la playa, que obtuvo más de 150.000 firmas. El promotor de la campaña fue Jean-Noel Falcou, un concejal de la oposición en Vallauris.
El entorno del rey dejó ver su descontento con respecto a esta campaña y a la polémica suscitada por el cierre de la playa y algunas instalaciones públicas.
Otra polémica más vino suscitada por oposición del rey saudí a la presencia de mujeres policías en el dispositivo de protección de la villa y la playa, lo cual llevó algunos medios como The Times a criticar duramente la actitud del monarca. De hecho el periódico calificó las vacaciones del soberano como "la farsa francesa".
El periódico señaló que "la familia real saudí no debería tener ninguna influencia en lo que respecta a escoger el sexo de los oficiales de policía que trabajan para protegerle en Francia" y criticó la decisión de las autoridades francesas de excluirlas del dispositivo. "En Europa, los hombres y las mujeres son iguales ante la ley, incluso si eso molesta al rey saudí. Él tiene la completa libertad de irse a un lugar que le guste más, como por ejemplo su propio país".
El periódico británico criticó también la actitud de las autoridades francesas de proceder al cierre de la playa pública con el fin de asegurar el disfrute de la familia real saudí y su entorno, así como el permiso para construir un ascensor que une directamente la villa real con la playa. El periódico afirmó que era imposible pretender obtener intimidad en la Riviera francesa en agosto y “el permitir a la familia real hacer lo que quiera es la última cosa que debería de suceder”, concluyó.
Se calcula que las vacaciones del rey Salman en Francia iban a costar unos 5.000 millones de euros, incluyendo la reserva de 400 habitaciones en hoteles de lujo durante tres semanas", reveló un periódico francés.