Nuevas revelaciones del sitio digital WikiLeaks ponen al descubierto hoy, planes conspirativos del gobierno de Estados Unidos para derrocar al presidente sirio Bashar al Assad.
Nuevas revelaciones del sitio digital WikiLeaks ponen al descubierto hoy, planes conspirativos del gobierno de Estados Unidos para derrocar al presidente sirio Bashar al Assad, desde hace nueve años.
En una entrevista concedida al canal ruso RT y difundida aquí, el fundador de WikiLeaks, Julian Assange, explicó que el ex embajador de Estados Unidos en Siria, William Roebuck, envió un cable a Washington en 2006, que incluía un plan para el derrocamiento de las principales autoridades sirias.
El plan presentado al Departamento de Estado norteamericano -explicó Assange-, buscaba crear "paranoia" dentro del gobierno de Damasco ante un posible golpe de Estado, provocar enfrentamientos con extremistas que se infiltrarían a través de la frontera con Iraq, y fomentar luchas sectarias.
Durante la entrevista con la cadena rusa, Assange explicó que existen otros documentos y cables que abordan el tema sirio, cuyos mensajes provocadores están entre líneas.
Estos materiales secretos y que revelan que los verdaderos planes contra Siria datan de mucho antes de las supuestas manifestaciones antigubernamentales de 2011, y forman parte del libro "Los archivos de WikiLeaks".
El pasado 29 de junio, Assange denunció el acuerdo secreto firmado en 2012 entre Arabia Saudí, Qatar y Turquía para derrocar al gobierno de Siria, con apoyo de Francia, Reino Unido y Estados Unidos.
A mediados de junio, WikiLeaks publicó más de 60 mil cables diplomáticos que revelan el papel de las autoridades de Arabia Saudí en el conflicto sirio, y su apoyo a bandas armadas extremistas, entre ellas el grupo terrorista EI.