Varias figuras religiosas egipcias se han unido a un creciente número de dirigentes del mundo musulmán para pedir un cambio en la autoridad a cargo de los rituales del Hayy.

Varias figuras religiosas egipcias se han unido a un creciente número de dirigentes del mundo musulmán para pedir un cambio en la autoridad a cargo de los rituales del Hayy (Peregrinación a Meca) con el fin de sustituir al gobierno saudí por una comisión de representantes de países musulmanes. Estos llamamientos se han multiplicado después de que el pasado viernes por la noche un grúa se derrumbara en la Gran Mezquita de Meca matando a 107 peregrinos e hiriendo a 238 más.

El incidente de la grúa ha sido uno más en los días recientes. Unas mil personas fueron evacuadas el jueves cuando un fuego estalló en el octavo piso de un hotel que alberga a peregrinos asiáticos en Meca.

La Defensa Civil saudí dijo que al menos dos personas resultaron heridas en el incendio que arrasó el hotel. La agencia no mencionó la nacionalidad de los peregrinos o la causa del incidente.

"Muchos errores han sido cometidos durante la ceremonia del Hayy en décadas recientes y el incidente sangriento del viernes no ha sido el primer caso ni será el último. De este modo, a menos que un cambio tenga lugar en la gestión y manejo de la ceremonia del Hayy en Arabia Saudí seremos testigos de la repetición de tales incidentes en el futuro también", afirmó Sheij Salman Mohammad, consejero del Ministerio del Patrimonio Islámico de Egipto, a Fars News.

Asimismo, Ashraf Fahmi, un profesor de la Universidad de Al Azhar, dijo que Arabia Saudí debe admitir sus errores en el manejo de la ceremonia del Hayy y tomar medidas que corrijan la forma en la que la peregrinación es gestionada.

La grúa se derrumbó rompiendo el tejado de la Gran Mezquita y causando la muerte de los 107 peregrinos. Ella era propiedad de una compañía perteneciente al príncipe heredero saudí Muhammad bin Salman, informaron medios árabes el sábado pasado.

Sin embargo, otras fuentes afirman que la grúa pertenece a una compañía alemana y era operada por el Grupo Bin Laden, la principal compañía constructora de Arabia Saudí. Ésta es propiedad de la familia Bin Laden a la que perteneció el famoso líder de Al Qaida Osama bin Laden. El rey Salman ha culpado a esta empresa del incidente.

En declaraciones el lunes, el presidente del Parlamento iraní, Ali Lariyani, culpó, sin embargo, al gobierno saudí de negligencia y afirmó que ésta fue la principal causa del colapso de la grúa en Meca.

"El gobierno saudí debería haber tomado las medidas necesarias para salvaguardar las vidas de los peregrinos", dijo Lariyani en un mensaje de condolencia a las familias de las víctimas.

Él lamentó este triste accidente durante los rituales del Hayy y pidió a las autoridades saudíes que investiguen inmediatamente las causas del incidente.