El Ejército sirio inició el viernes la batalla para la liberación de la totalidad de Alepo y su provincia.

El Ejército sirio inició el viernes la batalla para la liberación de la totalidad de Alepo y su provincia. “Es la batalla prometida”, indicó una fuente militar siria, que aseguró que la mayor parte de las fuerzas asaltantes está formada por militares sirios, aunque en la fuerza de ataque hay también combatientes de Hezbolá e iraníes así como miembros de las Fuerzas de Defensa Nacional (milicias civiles), según diversas fuentes.

Según el corresponsal de Al Manar, la batalla se ha desencadenado a partir de cuatro ejes: Jan Tuman, Yabal Azan, Al Wadihi y Tal Shaguib. Ella estuvo precedida de fuertes bombardeos aéreos de la aviación rusa y siria y de nutrido fuego de artillería.

En sólo unas pocas horas, las fuerzas gubernamentales se apoderaron de Yabal Azan, que se encuentra a 12 kms de Alepo. Ellas también conquistaron la ciudadela de Nayim, el cuartel de Al Kabdar así como la localidad de Hadadin, al oeste de Alepo, y Mliha y Aabtin, al sur de la ciudad.

Estos sectores estaban controlados por un mosaico de grupos terroristas wahabíes, incluyendo el Frente al Nusra (la rama de Al Qaida en Siria), Ahrar al Sham, Sukur al Sham y Failak al Sham.

El Mando unificado de las operaciones en Alepo invitó a los militantes a rendirse y a los ciudadanos a alejarse de sus sitios y posiciones y a no darles cobijo para evitar sufrir daños.

Preparativos desde hace semanas

Durante las últimas semanas, pudieron ser vistos preparativos de gran envergadura, lo que hacía presentir una próxima ofensiva. La ciudad de Alepo está dividida desde Julio de 2012 entre el sector oeste, que permanece en manos del Ejército, y el este, controlado por el Frente al Nusra y otros aliados wahabíes. El Ejército sirio controla las zonas situadas junto al límite norte de la ciudad.

El Ejército sirio ha estado encaminando refuerzos militares sin precedentes hacia las regiones que controla. Según el periódico Al Akhbar, convoyes de armamento pesados fueron enviados en el momento en el que los soldados sirios y combatientes de las Fuerzas de Defensa Nacional y de Hezbolá se agruparon a 25 kms al sureste de Alepo, en una región que podía servir de plataforma hacia diferentes destinos.

Una parte de esa gran fuerza fue dirigida hacia la ciudad de Alepo y más precisamente hacia el cuartel de Mahlab, que domina el barrio de Bani Zeid. Éste es el feudo de los terroristas y la base de un cañón que lanzaba bombonas de gas llenas de explosivos hacia los barrios lealistas, causando un gran número de muertos entre los civiles.