El ex primer ministro británico Tony Blair reconoció hoy errores en la guerra de Iraq y pidió perdón por ellos, aunque defendió el derrocamiento de Saddam Hussein.
El ex primer ministro británico Tony Blair reconoció hoy errores en la guerra de Iraq y pidió perdón por ellos, aunque defendió el derrocamiento de Saddam Hussein, según el adelanto de una entrevista para la cadena CNN.
"Puedo decir que pido perdón por el hecho de que la inteligencia que se recibió estaba equivocada", dijo Blair, quien sostuvo que Hussein "había usado armas químicas extensivamente contra su propia gente, contra otros", pero admitió que "el programa en la forma que pensábamos no existió".
La invasión en 2003 de Iraq se basó en supuestos informes de inteligencia -que luego resultaron falsos- sobre la posesión de armas de destrucción masiva por parte del régimen de Hussein, lo cual fue utilizado por Washington y el gobierno británico para justificar la guerra.
Blair, primer ministro de 1997 a 2007, fue el principal aliado del presidente estadounidense George W. Bush en su cruzada contra el terrorismo y, en particular, en la campaña de Iraq, que costó la vida a más de cuatro mil norteamericanos y a 179 británicos. El entrevistado continuó con su mea culpa: "Lamento alguno de los errores de planificación, y ciertamente, nuestro error en la comprensión de lo que pasaría una vez eliminaras el régimen".
Sin embargo, el político británico señaló que le "resulta difícil pedir disculpas por la eliminación de Saddam (Hussein). Creo que, incluso desde hoy en 2015, es mejor que no esté ahí...".
Vista la grave situación actual en Iraq, Blair admitió alguna responsabilidad en el ascenso del grupo terrorista EI en Oriente Medio.
En su opinión, existen "elementos de verdad" en la idea de que la invasión de 2003 constituye la principal causa del surgimiento de EI.
El ex gobernante aseguró que no se siente como "un criminal de guerra" por decidir intervenir en Iraq, pues entonces hizo lo que creyó correcto.
PL