El fenómeno anti-sionista y el odio a los judíos en el mundo árabe ha aumentado considerablemente después de la ola de revoluciones que se ha extendido por varios países.
Según un informe del Ministerio israelí de Relaciones Exteriores, “el fenómeno anti-sionista y el odio a los judíos en el mundo árabe ha aumentado considerablemente después de la ola de revoluciones que se ha extendido por varios países”.
El informe afirma que las revoluciones árabes “han contribuido a la propagación del sentimiento anti-israelí, con un creciente número de acusaciones contra Israel, el sionismo y los judíos de conspirar contra los árabes y los musulmanes.”
Él señaló que algunas declaraciones de la animosidad se hicieron evidentes durante la revuelta árabe, como se vio en las consignas que los egipcios gritaban durante las manifestaciones que pedían la caída del régimen y que acusaban a los elementos del mismo de ser “agentes del Mossad israelí”. Lo mismo sucede en Jordania o Túnez, donde los jóvenes rechazan cualquier tipo de normalización o contacto con la entidad sionista.