Varias fotos de dos tipos de lanzallamas similares a un lanzagranadas pórtatil se han difundido en varios medios y redes sociales.

Varias fotos de dos tipos de lanzallamas similares a un lanzagranadas pórtatil se han difundido en varios medios y redes sociales. Se trata de los modelos RPO-A y MRO-A. Estos modelos habrían sido vistos en un campo de batalla de Hama.

El MRO-A fue desarrollado en los años ochenta y lanza proyectiles de 93 mm. Posee un alcance máximo de 900 metros y puede lanzar proyectiles termales o explosivos.

El RPO-A Schmel puede lanzar granadas antitanque de 72 mm y tiene también una cabeza termal con un alcance máximo de 400 mm. Entró en servicio en el Ejército ruso a principios de la pasada década.

Ambas armas son similares, en su aspecto y funcionamiento, a los lanzagranadas clásicos RPG. Su principal característica es que emplea proyectiles y cargas termobáricas, es decir, incendiarias.

Según la revista norteamericana Popular Mechanics, el misil termal lanzado por el RPO-A es capaz de crear una nube de fuego de siete metros de diámetro, lo que permite destruir blindados pesados o el interior de edificios.

Estas armas inspiran terror a aquellos contra los que se utilizan, añade la revista estadounidense.

“El Schmel es un arma termobárica que posee proyectiles que se componen de un depósito lleno de combustible y dos cargas explosivas. Cuando el proyectil alcanza su objetivo, la primera explosión abre el depósito y dispersa el combustible en una nube. La segunda carga incendia el combustible y provoca una explosión devastadora que aniquila todo lo que se halla alrededor”.

“Estas armas son particularmente eficaces contra los efectivos que se encuentran en trincheras o búnkeres”, indica la publicación. Ellas muy útiles en los combates urbanos, donde permiten destruir fácilmente emplazamientos donde se sitúen enemigos armados o francotiradores.

En lo que respecta a su reciente historia, estos lanzallamas portátiles fueron utilizados por el Ejército ruso y los grupos terroristas en la Primera y la Segunda Guerras de Chechenia. En agosto de 2014, durante la Guerra de Ucrania, el punto de control ucraniano de Milove fue atacado por lanzallamas RPO-A. El principal edificio de aquella posición militar resultó destruido por cinco proyectiles incendiarios.