El mayor clérigo religioso shií de Iraq, el Gran Ayatolá Ali al Sistani, ha pedido al gobierno que muestre una “tolerancia cero” hacia cualquier país que viole la soberanía de Iraq.

El mayor clérigo religioso shií de Iraq, el Gran Ayatolá Ali al Sistani, ha pedido al gobierno que muestre una “tolerancia cero” hacia cualquier país que viole la soberanía de Iraq.

En una declaración publicada el viernes, Sistani dijo que los países vecinos no deben enviar tropas a Iraq sin el consentimiento del gobierno iraquí.

“El gobierno iraquí es responsable de proteger la soberanía de Iraq y no debe tolerar que ningún lado la viole, con independencia de las justificaciones que use”, señala la declaración.

La declaración, leída por el portavoz de Sistani, Sheij Abdul Mehdi Karbalai, no nombró a ningún país, pero se estaba refiriendo aparentemente a Turquía, que ha desplegado un contingente de tropas en el norte de Iraq.

Pese a la petición del gobierno de Iraq, que ha pedido a Ankara que retire a sus tropas, el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, ha afirmado que “el retirar nuestros soldados está fuera de cuestión por ahora”.

La declaración de Sistani también podría referirse a EEUU, que ha manifestado su voluntad de desplegar tropas en Iraq, ignorando la oposición del gobierno iraquí a tal medida.

Muqtada al Sadr promete atacar a las tropas turcas

Por su parte, el movimiento Al Sadr ha unido su voz al de otras fuerzas iraquíes en lo que se refiere a prometer una respuesta mortal a la agresión turca contra Iraq llevada a cabo mediante un despliegue de tropas en la parte norte del país.

“Si las fuerzas turcas no se retiran de Iraq, la Resistencia Islámica las atacará con nuevas y avanzadas técnicas”, dijo el portavoz del movimiento, Safa al Tamimi, a Fars News.

Tras señalar que el movimiento Sadr considera a cualquier fuerza extranjera en Iraq como un objetivo legítimo desde la invasión estadounidense de 2003, él dijo que la resistencia del movimiento contra la agresión extranjera se realiza en varias fases, incluyendo las negociaciones políticas, el lanzamiento de un ultimátum y la confrontación.

“Si el gobierno turco no retira sus fuerzas, Iraq mostrará una reacción más seria”, añadió