El bombardero táctico Su-34, el más avanzado en la Fuerza Aérea Rusa, ha experimentado algunos cambios para incrementar su efectividad.
El bombardero táctico Su-34, el más avanzado en la Fuerza Aérea Rusa, ha experimentado algunos cambios para incrementar su efectividad. Uno de ellos es el de dotarlo de sensores para facilitar la localización de las concentraciones y posiciones de los terroristas en Siria.
Otro cambio será el dotarlo de sistemas polivalentes que transformarán el bombardero en un aparato capaz de generar interferencias electrónicas en aviones y sistemas de defensa antiaérea enemigos, lo cual le servirá para protegerse a él mismo y a otros aparatos de las acciones hostiles.
El Grupo Ruso de Tecnologías Radio-Electrónicas (KRET), el más importante productor de sistemas de electrónica militar, ha enviado al Ejército ruso el primer grupo de sistemas de guerra electrónica Khibiny para los bombarderos Sujoi Su-34, anunció el viernes Igor Nassenkov, el primer director general adjunto del KRET.
“Este año, el KRET ha enviado por primera vez cajas de guerra electrónica a las Tropas Aeroespaciales rusas, que permitirán transformar al Su-34 de un avión convencional a otro especial de interferencia electrónica en sólo unos minutos. Este avión será capaz de interferir las comunicaciones de los sistemas antiaéreos y los aviones radar de larga distancia de tipo AWACS”, indicó Nassenkov.
Según él, el grupo aéreo protegido por este avión “desaparecerá literalmente de las pantallas de los radares enemigos”.
“El sistema de guerra electrónica no ocupa más que un punto de anclaje del Su-34. El avión puede asimismo interferir las comunicaciones enemigas mientras realiza misiones de bombardeo”, añadió el responsable.
El sistema multifuncional de guerra electrónica Khibiny asegura una protección individual contra los misiles aire-aire enemigos y los sistemas terrestres de defensa antimisil. Este sistema inteligente crea una nube numérica que convierte al aparato dotado del sistema en invisible para los radares enemigos y las cabezas guiadas de los misiles aire-aire y tierra-aire.
El sistema Khibiny se hizo famoso en todo el mundo en abril de 2014 cuando un bombardero ruso Su-24 sacó de su ruta al destructor norteamericano USS Donald Cook en el Mar Negro. El Su-24 no llevaba ningún misil ni bomba, sólo una caja de guerra electrónica. El destructor estadounidense, por el contrario, estaba armado hasta los dientes y equipado con el sistema de defensa Aegis.
Al aproximarse al navío, el Su-24 desconectó su radar y sus sistemas de combate y de transmisión de datos. El Donald Cook no se aproximó más a las aguas rusas. Después de su encuentro con el Su-24 ruso, él se dirigió rápidamente al puerto rumano de Constanza donde 27 tripulantes manifestaron su deseo de abandonar el navío.