Varios altos clérigos iraquíes en la ciudad santa de Nayaf, al sur de Iraq, han promulgado una fatua (decreto religioso) en favor del boicot a los productos saudíes.
Varios altos clérigos iraquíes en la ciudad santa de Nayaf, al sur de Iraq, han promulgado una fatua (decreto religioso) en favor del boicot a los productos saudíes, como reacción a la ejecución del prominente clérigo shií Nimr Baqir al Nimr.
Decenas de clérigos se manifestaron en las calles de Nayaf para condenar al régimen saudí por matar a Sheij Nimr y pidieron al gobierno iraquí que mostrara una seria reacción ante este crimen.
Asimismo, cientos de seguidores del movimiento sadrista, liderado por Muqtada al Sadr, se manifestaron cerca del barrio de Al Jadra, en Bagdad, para pedir el cierra de la embajada saudí y la expulsión del embajador. Los manifestantes marcharon en el exterior de la Zona Verde, que alberga a los departamentos gubernamentales y los edificios diplomáticos en Bagdad. Ellos llevaban retratos de Sheij al Nimr.
Los manifestantes trataron de cruzar una barrera de alambre de espino para acceder a la embajada saudí mientras gritaban: “Malditos, malditos sean los Al Saúd”. La policía, sin embargo, les cerró el paso.
El domingo, un cohete fue lanzado contra la embajada saudí en Bagdad explotando en sus alrededores.
En Basora, en el sur del país, los manifestantes llevaban pancartas que pedían a todos los iraquíes y al gobierno que boicoteen los productos saudíes.
En Kerbala, los manifestantes llevaban un ataúd que simbolizaba una procesión de funeral por Sheij Nimr y gritaban “Matar a Sheij Nimr será el principio de vuestra caída” dirigiéndose a la familia real saudí.
Por su parte, las milicias iraquíes han llamado también a la ruptura de lazos diplomáticos con Arabia Saudí- “¿Cuál es el interés de tener una embajada saudí en Iraq?”, se preguntó la milicia Asaib Ahlul Haq.
Qassam al Arayi, un líder de la Organización Badr, también pidió al gobierno que cortara las relaciones diplomáticas con Riad inmediatamente en una declaración retransmitida por Al Gadir, el canal de televisión del grupo.
El antiguo primer ministro iraquí, Nuri al Maliki, señaló que la ejecución de Sheij Nimr llevaría a la caída del gobierno saudí “como el crimen de la ejecución del mártir Mohammed Baqir al Sadr, un eminente sabio islámico iraquí muerto en 1980, hizo con el régimen de Saddam Hussein”.
Recientemente, la más alta autoridad shií de Iraq, Gran Ayatolá Ali Sistani, calificó de “agresión e injusticia” la ejecución de Sheij Nimr.