En este mes se llevará a cabo una negociación entre las partes de la guerra de Siria, concretamente las autoridades y los grupos de oposición no terroristas.

En este mes se llevará a cabo una negociación entre las partes de la guerra de Siria, concretamente las autoridades y los grupos de oposición no terroristas. Existe una unanimidad de posturas de que el EI y el Frente al Nusra, vinculado a Al Qaida, son grupos terroristas que no podrán participar en las negociaciones. Sin embargo, Arabia Saudí y Turquía han intentado privar de esta calificación a otros grupos que ejercen el terror de forma habitual y están aliados en el campo de batalla con los anteriores.

En este sentido, Rusia ha dejado claro que se opone a la participación en las negociaciones de dos grupos, Ahrar al Sham y el Yaish al Islam, ambos apoyados por Riad y Ankara. El ministro de Exteriores ruso, Serguei Lavrov, acusó en una entrevista televisiva a finales de diciembre a EEUU y la OTAN de mantener un doble rasero en la mayoría de crisis internacionales y en especial en la guerra de Siria, la de Ucrania y la lucha contra el terrorismo.

Él señaló que parece que algunos desean boicotear el encuentro de Viena 3, que se espera para finales de enero, entre la delegación del gobierno sirio y la oposición. Lavrov señaló que los grupos terroristas Yaish al Islam y Ahrar al Sham no tienen sitio en la mesa de negociaciones.

Él dijo que Rusia quería el inicio de un proceso político en Siria en enero y que la ONU seleccione a la delegación de la oposición siria y que ésta no se limite a un sólo grupo o equipo sino que incluya a personas que tomaron parte en varios encuentros los pasados dos años, incluyendo algunos realizados en Moscú y El Cairo y más recientemente en Riad.

Él afirmó que “el texto de la resolución de la ONU señala claramente que no hay lugar para los grupos terroristas en las negociaciones y citó en concreto a Ahrar al Sham y el Yaish al Islam. Este último ha bombardeado Damasco con morteros y atacado el edificio de la Embajada rusa en la capital siria, mientras que Ahrar al Sham es un grupo con vínculos con Al Qaida.

Lavrov señaló que “la actual administración norteamericana comprende claramente que el terrorismo en Siria y Oriente Medio es mucho más “peligroso” que Bashar al Assad y de lo que fue Saddam Hussein y Muammar al Gadafi.

Lavrov criticó también la falta de iniciativa europea y su dependencia con respecto a EEUU no sólo en los temas de Siria y Ucrania, sino en el conjunto de la política internacional.

Lavrov señaló también que la lucha contra el terrorismo debía llevarse en el campo de la educación, en especial en los países pobres, con el fin de que los niños y jóvenes caigan en las manos de organizaciones terroristas como el EI y el Frente al Nusra. Él señaló que había que prestar atención al tipo de enseñanzas sobre el Islam que se ofrece en las mezquitas con el fin de que la religión no sea falseada ni manipulada por elementos extremistas. Él citó el ejemplo de Yusuf al Qaradawi, líder espiritual de los Hermanos Musulmanes “que aparece periódicamente en Al Yazira y llama a los musulmanes de Egipto, la región y el mundo a rebelarse”.

Las declaraciones de Lavrov fueron seguidas poco después por las del viceministro de Exteriores ruso, Oleg Siromolotov, que explicó que Yaish al Islam y Ahrar al Sham son grupos terroristas y sus actividades criminales en Siria deben ser detenidas.

“Yaish al Islam y Ahrar al Sham son organizaciones criminales que deben ser eliminadas y su actividad detenida. Hay suficientes pruebas, créanme, que son también conocidas por nuestros socios extranjeros. Yaish al Islam está detrás de una serie de actos terroristas”, dijo Siromolotov.

En Julio de 2012, Yaish al Islam reivindicó un atentado con bomba contra el cuartel general de la Oficina de Seguridad Nacional en Damasco, que costó la vida de varios miembros del liderazgo sirio, incluyendo el antiguo ministro de Defensa sirio, Daud Abdulá Rayiha.

En 2013, después de tomar la ciudad de Adra (al norte de Damasco), el mismo grupo masacró a miembros de las minorías religiosas (alawíes e ismailíes) y en Mayo de 2015 lanzó un ataque con mortero contra la Embajada rusa en Damasco.

Este ataque fue reconocido como un acto terrorista por el Consejo de Seguridad de la ONU. Además, el grupo es responsable del ataque indiscriminado contra barrios de la capital siria, que han causado la muerte y heridas a cientos de civiles.

El Yaish al Islam ha colocado en jaulas en tejados de localidades que controla a civiles y prisioneros de guerra, incluyendo mujeres y niños, como escudos humanos para evitar bombardeos y ha organizado ejecuciones en masa que ha filmado en vídeos que luego ha colocado después con orgullo en Internet.

“Es también importante recordar que muchos militantes del Frente al Nusra, reconocida como grupo terrorista por la ONU, han sido reclutados por el Yaish al Islam”, añadió el viceministro ruso.