“Los cristianos son vampiros chupadores de sangre” y “La Navidad no tiene sitio en Tierra Santa”.

“Los cristianos son vampiros chupadores de sangre” y “La Navidad no tiene sitio en Tierra Santa”. Éstas son las últimas declaraciones del rabino Gopstein, líder del movimiento judío anti-asimilación Lahava.

En un artículo publicado hace varios días en el sitio haredi (ultraortodoxo) Hooker y reproducidas por el periódico israelí Haaretz, Benzi Gopstein denunció la presencia de los cristianos en Tierra Santa y les acusó de mantener actitudes proselitistas con respecto a los judíos. “La Navidad no tiene sitio en la Tierra de Israel. Expulsemos a los vampiros antes de que se abreven una vez más con nuestra sangre”.

Estas declaraciones suscitaron la indignación de la comunidad cristiana, sobre todo de los líderes católicos de Tierra Santa, que dieron a conocer el siguiente comunicado:

“Es con una gran consternación que la Asamblea de los Ordinarios Católicos de Tierra Santa ha conocido las declaraciones injuriosas y absolutamente inadmisibles del rabino Benzi Gopstein.

Nosotros conmemoramos este año el 50º aniversario de Nostra Aetate, una declaración sobre las relaciones entre la Iglesia Católica y las religiones no cristianas, y en primer lugar el Judaísmo. Este texto histórico, fruto del Concilio Vaticano II, ha sentado las bases para un diálogo necesario y sólido entre judíos y cristianos, bajo el sello del respeto, la fraternidad y la sinceridad.

Nosotros, Ordinarios Católicos de Tierra Santa creemos en este diálogo, en su importancia y en su viabilidad y condenamos con firmeza las declaraciones irresponsables del rabino Gopstein. Ellas son una ofensa a este mismo diálogo y a los valores que se vinculan al mismo.

Hace cuatro meses presentamos una queja contra Benzi Gopstein (ante las autoridades israelíes) sin que ninguna acción fuera tomada a tal efecto. Lanzamos de nuevo un llamamiento urgente a las autoridades israelíes y les decimos que estos intentos de intimidación y estas provocaciones recurrentes representan un peligro real para la coexistencia pacífica en esta tierra. Les pedimos que denuncien tales hechos con firmeza y que tomen las medidas que se imponen en interés de todos los ciudadanos. Los cristianos pertenecen a esta Tierra Santa y disfrutan de la Navidad con alegría, como han hecho siempre”.

Ésta no ha sido la primera provocación de Lahava. En agosto pasado, este grupo no dudó en afirmar que la ley judía preconizaba la destrucción de la “idolatría” en la tierra de Israel y, en consecuencia, las iglesias y las mezquitas deberían ser incendiadas.

Estas declaraciones de Gopstein se producen en un contexto marcado por actos de vandalismo contra edificios de culto cristianos realizados por extremistas judíos. Esto llevó a asociaciones católicas a demandar al rabino Gopstein por incitación al odio.

El domingo 29 de noviembre, activistas del grupo Lahava se manifestaron en Jerusalén para pedir que se prohibieran las celebraciones de Navidad de los cristianos y pidiendo la expulsión de estos últimos de Tierra Santa.


Patriarcado Latino de Jerusalén