Miles de manifestantes saudíes de la Provincia del Este de Arabia salieron a las calles el viernes pidiendo la “muerte” de la familia real de los Al Saúd.
Miles de manifestantes saudíes de la Provincia del Este de Arabia salieron a las calles el viernes pidiendo la “muerte” de la familia real de los Al Saúd durante una protesta contra la ejecución del dignatario shií Nimr al Nimr.
Según AFP, esta manifestación supuso la culminación de una semana de movilizaciones en la ciudad costera de Awamiya, en el Golfo Pérsico, de donde era originario el Sheij Nimr.
“Muerte a la familia Al Saúd” gritaban los manifestantes, según un testigo.
Los manifestantes llevaban banderas negras y fotos del sheij ejecutado. Esto pone de manifiesto la agudización de las protestas contra el régimen saudí, iniciadas en 2011. Se trata de la primera vez que se lanzan críticas y ataques abiertos a la familia real saudí.
Sheij Nimr abogó por reformas políticas democráticas para todos los saudíes y no sólo para la comunidad shií. Él llamó a realizar protestas pacíficas para lograr estos objetivos.
Según un habitante de Awamiya, la muerte de Sheij podría provocar un caos en las calles. “La situación ha cambiado totalmente”, dijo a AFP. “La gente está indignada”.
Los manifestantes quemaron neumáticos en las calles mientras que se oían disparos y explosiones de forma regular, según otro residente en la región, citado por la agencia.
Según él, pequeños grupos de “activistas” son los responsables de los incidentes en la calle. Éstos, sin embargo, fueron rechazados por la mayoría de la comunidad que se opone a las protestas violentas, incluyendo el hermano de Sheij Nimr.
“No tenemos necesidad de derramar ni una sola gota de sangre”, dijo Yaffar al Nimr a AFP, añadiendo: “En Qatif, la mayor parte de la gente están encolerizada”.
La familia Al Nimr ha recibido a millares de personas llegadas de muchas partes para presentar sus condolencias en los últimos días, indicó.
Las manifestaciones y protestas están totalmente prohibidas en el reino wahabií.