Irán estudia la posibilidad de construir una refinería en España para encontrar un nuevo mercado y asegurar sus exportaciones petrolíferas, declaró el lunes el ministro de Exteriores de España.
Irán estudia la posibilidad de construir una refinería en España para encontrar un nuevo mercado y asegurar sus exportaciones petrolíferas, declaró el lunes el ministro de Exteriores de España.
“Irán estudia la posibilidad de establecer una refinería en España, más concretamente en Algeciras, Andalucía”, dijo José Manuel Garcia-Margallo en Bruselas tras felicitarse por la entrada en vigor del acuerdo nuclear del G5+1 e Irán.
“España estuvo a punto de lograr un acuerdo con Rosneft”, el gigante del petróleo ruso para construir la refinería, pero las negociaciones se interrumpieron debido a las sanciones” impuestas por la UE contra Rusia, añadió.
“Sin embargo, la inversión iraní podría reavivar el proyecto y llevar a la creación de muchos empleos en la zona”.
Irán exporta hoy un millón de barriles de petróleo al día e incrementará esta cifra en medio millón más en los próximos días, tras el levantamiento de las sanciones. A finales de año, esta cantidad podría aumentar hasta los dos millones.
Teherán busca ahora incrementar sus mercados, en especial en Europa, para su petróleo.
China, India, Corea del Sur y Japón se han convertido en los principales clientes del petróleo iraní después de que Europa interrumpiera sus importaciones por la imposición de sanciones contra Irán debido al programa nuclear.
Ahora, con la entrada en vigor del acuerdo nuclear, la UE ha anulado todas las sanciones contra Irán.
El 9 de enero, el viceministro del Petróleo iraní, Abbas Kazemi, evocó la construcción de una refinería en España.
“Una propuesta ha sido hecha por varias empresas españolas para la construcción de una refinería destinada a segurar las ventas de petroleo iraní”, dijo el viceministro.
“Su capacidad será de 200.000 barriles y ella utilizará únicamente petróleo iraní”, añadió sin dar datos financieros sobre las inversiones de esta refinería, que serán divididas a partes iguales entre Irán y las compañías españolas. “Las negociaciones se hallan en curso y no han terminado aún”, dijo Kazemi.
“El objetivo a largo plazo es asegurar las exportaciones petrolíferas de Irán”, precisó.
Garcia-Margallo estimó que España estaba “en buena posición en Irán, donde las oportunidades son muy importantes y donde hace falta prácticamente reconstruir el aparato energético”. “Tenemos una posición preeminante con respecto a otros países”, añadió.
