El fiscal de Ankara ha abierto una investigación contra el jefe del principal partido de oposición turca acusándole de haber llamado al presidente Recep Tayyip Erdogan "dictador de pacotilla"...
El fiscal de Ankara ha abierto una investigación contra el jefe del principal partido de oposición turca acusándole de haber llamado al presidente Recep Tayyip Erdogan "dictador de pacotilla", informó la agencia de prensa pro-gubernamental Anatolia.
El presidente del Partido Republicano del Pueblo (CHP, socialdemócrata), Kemal Kiliçdaroglu, podría ser procesado por "insultar al presidente", un delito que en Turquía conlleva 4 años de cárcel, señala Anatolia.
Según los medios turcos, Erdogan ha reclamado 100.000 libras turcas (unos 30.000 euros) por daños y perjuicios a su adversario político.
Durante el congreso que le reeligió al frente de CHP el sábado, Kiliçdaroglu acusó a Erdogan de haber dado la orden de investigar a una veintena de profesores universitarios, que han firmado un documento en favor de la paz en el sur y sureste de mayoría kurda.
"Los intelectuales que expresan su opinión son detenidos, uno detrás de otro, por un dictador de pacotilla", dijo el líder opositor ante los delegados del partido".
"¿Cómo te atreves (Erdogan) a enviar a la policía a la puerta de estas personas y ordenar su arresto, dinos, dictador de pacotilla, lo que significan para ti el honor y el orgullo", añadió Kiliçdaroglu.
El pasado viérnes, la policía arrestó e interrogó a una veintena de profesores universitarios, que, junto con otros 1.200, habían firmado un documento denunciando "la masacre deliberada y planificada" del Ejército turco en varias ciudades de mayoría kurda, donde los militares llevan a cabo operaciones contra los guerrilleros del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK).
Los combates han provocado la muerte de centenares de civiles, según varias ONGs.
Erdogan ha acusado a los firmantes de ser "traidores" y cómplices del PKK.
Los arrestos de estos intelectuales, que fueron puestos luego en libertad, pero que se arriesgan a sufrir una pena de 1 a 5 años de prisión, han creado un escándalo entre la oposición turca y en el extranjero.
Desde su elección como jefe de estado en 2014, Erdogan ha sido acusado por sus detractores de llevar a cabo una deriva autoritaria y exremista. Erdogan ha multiplicado sus acciones represivas y sus acusaciones de "traición" contra críticos y opositores por "insultos" al presidente.