Para compensar la pérdida de ingresos de los convoyes de camiones cisterna destruidos por la aviación rusa en Siria, el grupo EI intensifica sus esfuerzos en Libia...
Para compensar la pérdida de ingresos de los convoyes de camiones cisterna destruidos por la aviación rusa en Siria, el grupo EI intensifica sus esfuerzos en Libia, donde busca apoderarse de nuevas instalaciones petrolíferas.
“El EI ha perdido gran parte de su viabilidad territorial y va a buscar una nueva patria. Ellos ven una oportunidad de encontrarla en Libia”, señaló el experto Gregory Copley, a RT. Según cifras internacionales, unos 5.000 terroristas del EI se han establecido ahora en el país.
Varios ataques contra terminales petrolíferas en la costa se han producido en las primeras semanas del año. Los combatientes del EI han asediado los puertos de Sidra y Ras Lanuf, importantes centros de producción y tránsito del petróleo, matando a 11 guardias e incendiando siete contenedores. La columna de humo del petróleo era visible hasta en el espacio.
Un atentado con una furgoneta llena de explosivos, algunos días más tarde, destruyó una academia de policía, causando 60 muertos, en su mayor parte jóvenes reclutas.
El principal bastión del EI en Libia es la ciudad mediterránea de Sirte, a varios cientos de kilómetros de la frontera sur de Europa. Es a partir de esta ciudad que los terroristas organizan estos ataques, que suscitan la preocupación de los servicios de seguridad occidentales, que temen que el EI pueda aprovechar la situación complicada en el país para apoderarse de grandes partes de su territorio, como sucedió en Iraq”, señaló el antiguo agente de la CIA, Michael Morell.
Libia es también una puerta a otros estados africanos, que comparten con ese país un gran desierto que se extiende por buena parte del Norte de África y el África subsahariana. Desde Libia, el EI puede también contactar y coordinar sus acciones con el grupo Boko Haram. Además, la existencia de una gran masa de población desempleada o con dificultades económicas en la región puede favorecer el reclutamiento del grupo.
Por su parte, el periodista de la agencia Pan-African News Wire, Abayomi Azikiwe, cree que será difícil contrarrestar los intentos del EI de expandirse en Libia, donde este grupo se coordina con un mosaico de milicias armadas.
Libia se encuentra en una situación caótica tras la intervención militar de la OTAN en 2011, que llevó a la caída del régimen de Muammar al Gadafi. Dos gobiernos y dos parlamentos rivales se disputan el poder. Recientemente, el Parlamento de Tobruk, el reconocido internacionalmente, rechazó la propuesta de la ONU sobre la creación de un gobierno de unidad nacional.