Un grave incidente ocurrió entre guardaespaldas del presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, y estudiantes ecuatorianas durante un acto en el Centro de Altos Estudios Nacionales de Quito.

Un grave incidente ocurrió entre guardaespaldas del presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, y estudiantes ecuatorianas durante un acto en el Centro de Altos Estudios Nacionales de Quito, en el que el primero intervenía. Erdogan visitó Ecuador como parte de su gira por algunos países latinoamericanos.

Los guardaespaldas de Erdogan mostraron altos niveles de brutalidad hacia tres estudiantes que increparon al presidente turco llamándole “asesino” mientras éste estaba pronunciando una conferencia. Ellas fueron sacadas violentamente del lugar, y, según su relato, golpeadas en el rostro y manoseadas por los guardaespaldas. Ellas querían denunciar los ataques militares del Ejército turco contra la población kurda en el sureste de Turquía.

Ellas denunciaron que sus rostros, pechos y partes íntimas fueron manoseados por los guardaespaldas.

Éste no fue el único incidente protagonizado por los guardaespaldas de Erdogan durante su primer visita oficial de dos días al país latinoamericano.

El jueves, ellos se enfrentaron a un grupo de manifestantes pro-kurdos que protestaban contra la operación del Ejército turco en las zonas kurdas de Turquía.

Un abogado ecuatoriano, Diego Vintimilla, que estaba entre los manifestantes, resultó herido durante una pelea con uno de los guardaespaldas de Erdogan.

Ataques a Siria

Aunque la gira debía tener un carácter predominantemente económico, Erdogan ha aprovechado su visita a Chile, Perú y Ecuador para atacar al presidente sirio, Bashar al Assad.

En una universidad de Perú, que le concedió un doctorado honorífico, Erdogan pronunció un discurso, que fue retransmitido en directo por algunas cadenas de televisión turcas. Expresando su frustración por los avances militares sirios en Latakia y Alepo, él acusó al Ejército sirio “de matar a gente cada día” y no olvidó tampoco culpar al Partido de la Unión Democrática, mayoritario entre los kurdos de Siria, y al presidente Vladimir Putin de “asesinar a civiles que no luchan en las filas del EI”.

Él manifestó que no permitiría al Ejército sirio aproximarse a la frontera turca y que defendería a los “cientos de miles de turcomanos (!) en el área”. Las estadísticas oficiales hablan, sin embargo, de sólo 20.000 turcomanos en Siria, que han huido en su mayoría hacia Turquía.

Estas declaraciones buscaban camuflar el fracaso de la política turca en Siria que no sólo ha visto como los protegidos del régimen de Erdogan son derrotados en el norte del país, sino que no ha podido tampoco impedir que las Unidades de Protección del Pueblo Kurdo (YPG) derroten a sus protegidos del EI y avancen hacia la ciudad de Yarabulus, a pesar de las amenazas del gobierno turco.