El estudiante de la Universidad de Virginia, Otto Warmbier, detenido aproximadamente dos meses atrás en Corea del Norte, confesó haber realizado "actividades hostiles contra la república".
El estudiante de la Universidad de Virginia, Otto Warmbier, detenido aproximadamente dos meses atrás en Corea del Norte, confesó haber realizado "actividades hostiles contra la república", según informó el canal de televisión CNN.
En un vídeo en disposición del canal el estudiante lee una declaración en la que confiesa que cometió "el delito consistente en arrancar un cartel político en la zona restringida al personal del hotel internacional Yanggakdo".
Anteriormente la Agencia Telegráfica Central de Corea informó que el estudiante norteamericano confesó haber entrado al país por órdenes del Gobierno de EEUU bajo la fachada de turista, para realizar actividades hostiles, y que en su contra se había iniciado una investigación.
La Agencia Telegráfica Central de Corea señaló que el estudiante estadounidense, "al amparo y bajo las órdenes del Gobierno estadounidense ingresó como turista en Corea del Norte para realizar actividades hostiles contra la República con el objetivo de dañar las bases de la unidad de Corea, pero fue descubierto y enfrenta una investigación".
Otto confiesa en el vídeo que no debió bajo ningún concepto "ceder a la tentación de la administración de EEUU y cometer un delito" en este país, y pide perdón por lo cometido "a los millones de ciudadanos de Corea".
Las autoridades de Corea del Norte afirman que el propio Otto solicitó realizar la conferencia de prensa, aunque la CNN supone que el estudiante pudo haber sido obligado a leer esta disculpa.
Éste no es el primer caso de detención de ciudadanos estadounidenses en Corea del Norte.
Uno de los casos más sonados fue el arresto en 2009 de dos periodistas norteamericanas, Laura Ling y Euna Lee, detenidas en la frontera con China durante la grabación de un reportaje televisivo sobre los refugiados de Corea del Norte.
La violación de la frontera y el hecho de tener materiales fílmicos contra Pyongyang les valió una condena de 12 años de trabajos forzados, pero tras largas conversaciones EEUU logró la liberación de las periodistas.
Sputnik