El cese de hostilidades en Siria ha sido la ocasión para que todos los protagonistas hagan descansar sus armas, excepto el EI y el Frente al Nusra.

El cese de hostilidades en Siria ha sido la ocasión para que todos los protagonistas hagan descansar sus armas, excepto en lo que respecta a los dos grupos excluidos del alto el fuego: el EI y el Frente al Nusra. Sin embargo, los patrocinadores del terrorismo podrían no querer quedarse de brazos cruzados y esperar que las cosas sigan su camino. Según los analistas, son probables ataques de falsa bandera dirigidos a romper este cese el fuego.

Este ataque tendría como fin el de acusar al Ejército sirio o a la Fuerza Aérea rusa de haber violado el cese de hostilidades. Sin embargo, ¿por qué el gobierno sirio o Rusia iban a romper un acuerdo que ellos mismos han puesto en pie? El Ejército sirio y el ruso son ejércitos de estados y sus objetivos son estratégicos. El hecho de causar la muerte a algunos terroristas más no es algo que tenga importancia para ellos.

Por el contrario, Turquía, que está a tiro de cañón o de misil de las posiciones de algunos grupos armados que han aceptado la tregua podría enviarles algún obús. El EI o el Frente al Nusra podrían hacer lo mismo. Turquía y los terroristas tienen interés común en un cese de las hostilidades. De este modo, una violación del cese el fuego no podría en ningún caso, proceder del Ejército sirio o de sus aliados, sino de algunos de los países que buscan expandir la guerra en Siria y que tienen además una larga tradición de llevar a cabo este tipo de actos.

Cuando Davutoglu y Fidan prepararon un falso ataque

A finales de marzo de 2014, una explosiva grabación filtrada apareció publicada en YouTube. En dicho vídeo varios ministros y el jefe del servicio de inteligencia turco hablaban acerca de llevar a cabo un falso ataque “sirio” contra un lugar emblemático para los turcos o la propia Turquía con el fin de obtener una excusa para atacar Siria.

En el audio, aparecían varios altos responsables del gobierno discutiendo un potencial ataque contra la tumba de Suleiman Shah, el abuelo del fundador del Imperio Otomano. La tumba está en territorio sirio pero está custodiada por soldados turcos.

El ministro de Exteriores turco, Ahmet Davutoglu, afirmaba en la grabación que Erdogan vería un ataque contra la tumba como “una oportunidad” para incrementar la presencia turca en Siria, donde ha Turquía ha apoyado a los terroristas que luchan contra el gobierno de Bashar al Assad. El jefe del servicio de Inteligencia turco, Hakan Fidan, fue un paso más allá y sugirió preparar un falso ataque para dar a Turquía una excusa para intervenir en el conflicto.

“Enviaré a 4 hombres de Siria. Crearé una causa para la guerra ordenando un ataque con misiles contra Turquía. Podemos preparar también un ataque contra la Tumba de Suleiman Shah si es necesario”, dijo Fidan.

¿Qué tipo de ataque?

Los terroristas disponen de armas químicas. Los kurdos afirman haber sufrido ataques químicos por parte del EI. Los países que apoyan el terrorismo podrían repetir la provocación de Guta Oriental en agosto de 2013 y culpar al Ejército sirio de un ataque químico que ellos mismos habrían llevado a cabo. Haría falta, sin embargo, preguntarse por qué el Ejército sirio iba a usar un arma de la que no sólo no tiene necesidad sino que ni siquiera ahora posee.

Otra posible provocación sería una masacre de civiles que sería imputada a la aviación rusa o a los cañones sirios. Conocemos la precisión de los ataques aéreos rusos y la fiabilidad de sus informaciones. Esto no es aparentemente el caso de los grandes medios para los que todo terrorista muerto se convierte en un civil.

Veremos quizás algunos hospitales o escuelas atacadas por bombas. Recordamos, sin embargo, que contrariamente a lo que sucede con la coalición liderada por EEUU, la aviación rusa trabaja estrechamente con las autoridades sirias que conocen la existencia y emplazamiento de cada escuela u hospital del país, a menos que sea un "hospital" montado rápida o clandestinamente por una "ONG", los rusos conocen perfectamente estos emplazamientos.

Desgraciadamente, una de las características de los ataques de falsa bandera es que su naturaleza es imprevisible. Existen otras posibilidades que ahora mismo no pueden ser imaginadas. Sin embargo, la cuestión del porqué deberá servir para no dejarse engañar si ellos tienen lugar y para despejar las cortinas de humo que algunos medios occidentales y árabes tratarán de crear para acusar sin pruebas, como es usual, a Siria o a Rusia de un ataque de este tipo.