Hezbolá no es una organización sino un ejército en todo el sentido del término, señaló el servicio de inteligencia militar israelí Aman.

Hezbolá no es una organización sino un ejército en todo el sentido del término, señaló el servicio de inteligencia militar israelí Aman, en una declaración recogida en un artículo del cronista militar del diario Haaretz, Amos Harel.

Esta evolución de Hezbolá ha tenido lugar, según el Ejército israelí, gracias a la guerra en Siria, que le ha permitido acumular una importante experiencia militar.

“Desde hace tres años y medio de combates de Hezbolá en Siria, éste ha pasado de proteger sus depósitos de armamento en Siria a combatir en las primeras líneas del frente, con la participación de unos 5.000 combatiente”, señaló Aman.

Según el corresponsal militar de Haaretz, Hezbolá ha ganado experiencia de combate al lado de los oficiales iraníes y rusos, lo que ha elevado su capacidad militar. Además, sus comandantes y soldados han acumulado una experiencia operativa de gran valor. Ellos han efectuado operaciones conjuntas por primera vez con aviones, helicópteros y drones, sin olvidar la artillería, los tanques y los aparatos de radar y detección sofisticados.

De este modo, el Ejército israelí considera a Hezbolá como un ejército de rango medio que lleva a cabo una continua modernización de sus capacidades. Él contaría, según Israel, con 45.000 soldados, incluyendo 21.000 regulares, y más de 100.000 misiles y cohetes con los que puede golpear cualquier parte de la entidad sionista.

Harel dice en su artículo que se toma muy en serio las advertencias del primer ministro israelí, Benyamin Netanyahu, ante de la Asamblea General de la ONU sobre la capacidad de Hezbolá para transferir desde Siria al Líbano sistemas de combate sofisticados, incluyendo misiles tierra-tierra, misiles antiaéreos SA-22 y misiles antibuque Yajont P-800.

“Hezbolá dispone de capacidades autónomas en campos vitales como comandos de élite, drones de ataque etc”, constata el periodista de Haaretz.

Él cita también el artículo de un oficial de los servicios de inteligencia israelíes en el cual éste expone sus previsiones sobre las intenciones de Hezbolá en caso de guerra. Él teme que Hezbolá intente tomar el control de Galilea en caso de conflicto.

El oficial cree que Hezbolá ha desarrollado sus capacidades para poder llevar ataques a lo largo de la frontera desde el inicio de una posible guerra, lo que le permitiría desbaratar los movimientos del Ejército israelí en esta región. “Como la zona es montañosa, el asaltante puede contentarse con el factor sorpresa y renunciar a los túneles subterráneos”, señaló.

El analista de Haaretz señala que el Ejército israelí debería de informar al público sobre sus previsiones “sobre todo dado que los oficiales esperan sufrir graves pérdidas durante una próxima guerra con el Líbano, además de pérdidas materiales serias, causadas por la caída de misiles en todas las regiones israelíes”.

Harel concluye afirmando que el Ejército israelí hace frente a una confrontación que no tendrá nada que ver con todas las guerras pasadas. Razón por la cual, señala, le valdría más a Israel tratar de reforzar su fuerza de disuasión e impedir que tal guerra estalle.