Unas 30 ciudades y pueblos en la provincia de Hama se han unido a los procesos de reconciliación nacional puestos en marcha por el gobierno sirio...
Unas 30 ciudades y pueblos en la provincia de Hama se han unido a los procesos de reconciliación nacional puestos en marcha por el gobierno sirio, señaló el centro ruso que monitoriza el cese de hostilidades en Siria.
El centro señaló el jueves que representantes de comunidades locales habían firmado un acuerdo que prohíbe el uso de armas contra las fuerzas del gobierno y ha entrañado el retorno de la electricidad a la región.
“El trabajo es muy meticuloso y delicado. Todo está basado en temas religiosos y nacionales. Pero unas 30 localidades han firmado una solicitud para unirse a un proceso de reconciliación nacional”.
El pasado lunes, unos 1.000 militantes rindieron las armas y pidieron la regularización de su estatus en un encuentro celebrado en la sede del gobernador de Deraa.
Procesos similares han sido también puestos en marcha en áreas de Damasco y Homs.
En la provincia de Deraa, en el sur de Siria, la ciudad de Abtaa ha visto la entrada de convoyes humanitarios en estos días en línea con el proceso de reconciliación llevado a cabo en la ciudad, que anunció un acuerdo con el Estado sirio junto con la localidad vecina de Dael, a pesar de los ataques de algunas facciones del llamado Ejército Sirio Libre dirigidos a abortar tales procesos.
Otras localidades del este de la provincia como Busra al Harir, Tafas y Naemeh buscan también acuerdos de reconciliación, pero el principal obstáculo para su materialización es la presencia de terroristas del Frente al Nusra, que se oponen a tales pactos, dado que ellos implican su salida de las localidades.
Estos programas han sido puestos en marcha por el Ministerio de Reconciliación Nacional de Siria y buscan resolver la crisis en el país.
Bajo tales programas, los militantes rinden sus armas y vuelven a la vida normal si prometen no volver a luchar contra el Estado. Las ciudades izan la bandera siria y pueden recobrar así la normalidad.