El primer ministro de Argelia ha firmado en Moscú decenas de acuerdos de cooperación sobre la energía, el armamento, la industria y la agricultura.
El primer ministro de Argelia ha firmado en Moscú decenas de acuerdos de cooperación sobre la energía, el armamento, la industria y la agricultura.
Las dos partes han reafirmado su convergencia de puntos de vista en términos políticos y diplomáticos en temas como Siria, Iraq o Yemen. Sobre esta base, no es osado prever la adhesión inminente de Argel al eje Moscú-Teherán-Damasco. Este eje se opone al eje saudí-wahabí en Oriente Medio y el Golfo Pérsico, que busca contrarrestar la influencia de Irán. Riad reacciona violentamente contra cualquier parte que coopera con Irán.
El periódico Al Arab, que aparece en Londres, ha analizado los puntos contenciosos que oponen a Argel y Riad. “Las dos partes están en una fase de tensiones latentes. Argel se ha negado a sumarse a la coalición de guerra contra Yemen. La baja del precio del petróleo, que provocó Riad para contrarrestar a Rusia e Irán, ha deteriorado fuertemente las relaciones saudo-argelinas, sin contar el apoyo de Argel a Damasco, la oposición de Argelia a sumarse a la coalición liderada por Arabia Saudí contra Yemen y su rechazo a clasificar a Hezbolá como una organización “terrorista”.
Hace algunas semanas, el presidente argelino, Abdul Aziz Buteflika, envió a un emisario especial a Riad para dejar clara cual era la postura de Argel en todos estos temas. Las autoridades saudíes declinaron la invitación del presidente argelino al rey para visitar el país norteafricano y acusaron a Argel de “sembrar la cizaña” en el seno del mundo árabe.
En la última cumbre árabe, la Liga Árabe reconoció la soberanía marroquí sobre el Sahara Occidental provocando así la ira de Argel. Esto último pareció ser la última gota de agua que ha desbordado el vaso: esta medida habría decidido a Argel a unirse al eje Moscú-Teherán-Damasco. Poco después, un emisario argelino llegó a Damasco, una visita precedida por la del primer ministro argelino a Moscú. Una alta delegación argelina es esperada también en Teherán.
En Moscú, el primer ministro argelino expresó, a través de la firma de decenas de contratos, su voluntad de sentar las bases de una nueva ecuación estratégica en Oriente Medio, que no será del gusto de Riad y sus aliados.
Rusia va a suministrar a Argelia ocho aviones Sujoi antes del fin del año y otros ocho el año próximo. Baterías de defensa antiaérea de largo y medio alcance van a ser igualmente entregadas a Argel.
El montante de los contratos se eleva al menos a 8.000 millones de dólares. El Ejército argelino es el segundo del mundo árabe y el 27º del mundo.
El eje Irán-Rusia-Siria-Argelia se reforzará aún más a raíz de la cooperación entre Gazprom y Argelia en el tema de la extracción de gas de esquisto.