La Oficina de Servicios de Control Interno de Naciones Unidas (OIOS) prosigue las investigaciones por las denuncias de abusos sexuales cometidos por tropas extranjeras en la República Centroafricana.
La Oficina de Servicios de Control Interno de Naciones Unidas (OIOS) prosigue las investigaciones por las denuncias de abusos sexuales cometidos por tropas extranjeras en la República Centroafricana, señaló el jueves un portavoz citado por la agencia Prensa Latina.
Según el vocero del Secretario General de la ONU, Stephane Dujarric, expertos trabajan en la central prefectura de Kemo, donde se produjeron las recientes acusaciones por atropellos sexuales de cascos azules y militares franceses, incluyendo contra niños.
Un equipo de la OIOS trabaja en Kemo desde la tercera semana de abril, precisó en declaraciones a la prensa.
De acuerdo con Dujarric, los investigadores laboran junto a colegas de Burundi y Gabón, así como del Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) y el Fondo de Población (Unfpa).
El año pasado estalló el escándalo por los abusos sexuales cometidos por tropas francesas y cascos azules, desplegados en la República Centroafricana en respuesta al conflicto entre musulmanes y cristianos desatado a finales de 2013.
Ante la magnitud de las denuncias, el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, activó en 2015 una pesquisa, y este año propuso medidas para prevenir y lidiar con futuros atropellos.
Además de los efectivos franceses de la Operación Sangaris, cascos azules burundeses y gaboneses han sido acusados de los delitos sexuales.
Altos funcionarios de Naciones Unidas insisten en la necesidad de investigar lo ocurrido y de castigar a los responsables de los crímenes en sus países de origen.