El representante especial del secretario general de la ONU para Iraq, Jan Kubis, condenó enérgicamente los atentados terroristas que el jueves ocasionaron más de 30 muertos en Bagdad y en Tayi.
El representante especial del secretario general de la ONU para Iraq, Jan Kubis, condenó enérgicamente los atentados terroristas que el jueves ocasionaron más de 30 muertos en Bagdad y en Tayi, destacó el viernes un comunicado citado por la agencia Prensa Latina.
Kubis emitió una nota de prensa en la cual expresó condolencias a las familias de las víctimas fatales de los ataques con explosivos perpetrados por grupos extremistas en el distrito Al Yadida de Bagdad y en inmediaciones de una base militar en la localidad de Taji, en el norte de la capital.
Al expresar deseo de pronta recuperación a los 78 heridos, el diplomático valoró de "horrible" que el EI perpetrara tales acciones violentas durante el mes sagrado musulmán del Ramadán.
Tales ataques "no solo buscan infligir un elevado número de víctimas en la población civil, sino también debilitar la unidad del país y destruir su tejido social", apuntó Kubis al subrayar que "al EI no se le debe permitir tener éxito".
El mensaje del representante de Ban Ki-moon en Iraq consideró "imperativo que todos los iraquíes de diferentes afiliaciones y estratos se junten en la condena a esos actos cobardes".
Luego de actualizar las cifras de víctimas por los atentados de ayer, fuentes médicas y policiales precisaron que al menos 19 civiles fallecieron y 46 resultaron heridos por el ataque en un área comercial de Al Yadida, con predominio de residentes musulmanes chiitas.
Ese atentado, el más letal de los registrados ayer, se perpetró con un carro cargado de explosivos, indicó un coronel de la policía al añadir que el otro se ejecutó con un vehículo y la inmolación de un suicida cerca de la referida instalación de Taji, unos 20 kilómetros al norte bagdadí.
Allí perdieron la vida al menos 12 iraquíes -siete civiles y cinco soldados- y otros 32 sufrieron lesiones por la detonación.