La situación en Raqqa, capital del EI en Siria, continúa deteriorándose en un momento en el que el Ejército sirio y las Fuerzas de Defensa Nacional continúan expulsando al EI de más posiciones.

La situación en Raqqa, capital del EI en Siria, continúa deteriorándose en un momento en el que el Ejército sirio y las Fuerzas de Defensa Nacional continúan expulsando al EI de más posiciones y devolviendo la seguridad a más tierras cerca de la base aérea de Al Tabaqa.

Las fuerzas del gobierno sirio han atacado las líneas de defensa del EI cerca de los pueblos de Harbiyat y Anbay en la región de Al Tabaqa.

El Ejército sirio y sus aliados han registrado varias victorias sobre el EI y han liberado al menos 57 kms de la carretera que va desde Al Izriya a Al Rasafeh.

Fuentes del campo de batalla han anunciado que el triángulo de Al Safih, localizado cerca del campo de petróleo de Al Habbari, está ahora bajo el pleno control del Ejército sirio y sus aliados.

Aviones rusos y sirios han estado llevando a cabo ataques contra las posiciones del EI en la provincia de Raqqa en los pasados días, destruyendo posiciones militares y concentraciones del grupo en Raqqa.

Los bombardeos son intensos y parecen apuntar a una política de destrucción total de los recursos del grupo con el fin de facilitar el avance militar hacia Raqqa.

Los avances y los ataques del Ejército sirio han provocado una situación de caos en Raqqa.

Las noticias que proceden de la ciudad hablan de que ella está llena de combatientes extranjeros que matan y torturan a residentes y protagonizan saqueos, ya que el salario de los militantes de la organización se ha colapsado en las pasadas semanas debido a los cortes de las rutas hacia Turquía y la toma de muchos campos de petróleo por parte de las fuerzas sirias y sus aliados.

El grupo ha impuesto un toque de queda, prohíbe el movimiento de los residentes y trata de impedir la circulación de información castigando con la pena de muerte a quien difunda noticias sobre sus reveses militares.

Algunos relatos también aseguran que el tesorero del grupo en Raqqa, el saudí Hatim al Utaihi, habría huido de la ciudad con dinero del grupo, según la agencia Sputnik.

Al mismo tiempo, muchos combatientes occidentales del EI, principalmente saudíes y chechenos, buscan también salir de la ciudad.