Erard Corbin de Mangoux. Este hombre ha dirigido desde 2008 el principal de los servicios de inteligencia franceses, la DGSE.

Erard Corbin de Mangoux. Este hombre ha dirigido desde 2008 el principal de los servicios de inteligencia franceses, la DGSE. De creer la información exclusiva publicada el lunes por el diario italiano Il Floglio fue bajo su responsabilidad que al presunto asesino de Toulouse, Mohamed Merah, se le dio acceso en septiembre de 2010 al territorio israelí.

A cambio, el joven fue para llevar la información a los funcionarios del contraespionaje francés. ¿Fue Mohamed Merah un informante de la DGSE? En este caso, donde todo sigue siendo oscuro, una cosa es cierta: el actual líder de los servicios secretos fue nombrado por Nicolas Sarkozy, por su cercanía al presidente.

Rompiendo con la regla habitual del nombramiento de un militar como jefe de la DGSE, Sarkozy optó por situar uno de sus hombres, prefecto de carrera, al frente de la Inteligencia Extranjera.

Este nuevo elemento sugiere una connivencia estrecha entre la seguridad del Estado y el movimiento yihadista. Un poco de información conocida aquí merece ser recordada: a finales de 2001, el terrorista Richard Reid intentó sin éxito detonar explosivos ocultos en su zapato durante un vuelo París-Miami.

Un testimonio posterior, recogido por el programa “Pièces à conviction” del Canal France 3, fue particularmente interesante: de acuerdo con un oficial de control del aeropuerto de París, Richard Reid pudo fácilmente subir a bordo porque tenía un sello israelí en su pasaporte.

Un elemento que algunos interpretaron como una garantía definitiva de seguridad para el embarque de un pasajero considerado sospechoso. Para el hombre a cargo del control, el acceso -por lo general difícil- al territorio israelí significa que el turista no presenta ningún peligro particular, ya se le ha permitido pasar a través de una de las aduanas más controladas del mundo.