Los seguidores del ex candidato presidencial Bernie Sanders quemaron una bandera israelí durante una manifestación de protesta delante de la sede de la Convención Demócrata en Filadelfia el martes.

Los seguidores del ex candidato presidencial Bernie Sanders quemaron una bandera israelí durante una manifestación de protesta delante de la sede de la Convención Demócrata en Filadelfia el martes.

Los seguidores de Sanders se unieron a otros grupos, incluyendo Black Lives Matter y manifestantes pro-palestinos, en una protesta. Los manifestantes entraron en el Wells Fargo Arena, donde la convención tenía lugar, antes de que las fuerzas de seguridad bloquearan las entradas.

La Convención Demócrata fue escenario de protestas masivas tras la controversia desatada por la publicación de miles de emails del partido por Wikileaks, que mostraron que los empleados y responsables del Partido Demócrata favorecieron a Hillary Clinton sobre el senador Sanders de manera ilegal.

La controversia llevó a la presidenta del Comité Nacional Demócrata, Debbie Wasserman Schultz, a anunciar que iba a dimitir cuando la convención hubiera terminado.

Muchos de los manifestantes del martes llevaban sus bocas tapadas para simbolizar sus voces “silenciosas”.

“Desde que llegamos aquí, al Comité Nacional Demócrata no le importó cuáles eran nuestras opiniones. Ellos ya habían coronado a Hillary Clinton y le dieron la nominación antes de que tuviera lugar un voto”, dijo Raina Whiting, una delegada de Hawaii, a The Blaze.

“El CND debe saber que estas personas que son parte del partido ahora podrían dejar de serlo”, dijo Whiting.

“Ellos no apoyarán a Hillary Clinton; ellos votarán a un tercer partido. Y, si lo hacen, Donald Trump se convertirá en presidente. El CND debería reflexionar acerca de las voces que están siendo suprimidas aquí”.

Tras la nominación de Hillary Clinton, muchos de los seguidores de Sanders abandonaron el salón de la convención.

Poco antes, el propio Sanders había pedido a sus seguidores que votaran por Clinton durante la convención.

En un encuentro el lunes, Sanders acusó a Trump de ser “un demagogo” y dijo que éste debía ser derrotado.

“Tenemos que derrotar a Donald Trump. Tenemos que elegir a Hillary Clinton y a Tim Kaine”, dijo el senador por Vermont.

Sus declaraciones provocaron abucheos y silbidos por parte de sus seguidores, uno de los cuales afirmó que Clinton “robó la elección”.

Los abucheos mostraron la creciente rabia de los delegados de Sanders por la nominación de Clinton y el escándalo de la manipulación de los dirigentes del partido a favor de Clinton, recogido en los emails publicados el viernes por Wikileaks.

Muchos de los seguidores de Sanders han advertido que ellos no votaran por Clinton.

“No, CND, no votaremos por Hillary” y “Así funciona la democracia”, dijeron los manifestantes.