Fuerzas especiales del Ejército sirio, respaldadas por la Brigada Al Quds, compuesta por palestinos que luchan al lado de aquel, lanzaron una nueva operación en el distrito de Shaher.
Fuerzas especiales del Ejército sirio, respaldadas por la Brigada Al Quds, compuesta por palestinos que luchan al lado de aquel, lanzaron una nueva operación en el distrito de Shaher, al este del Campo de Refugiados de Handarat, al norte de Alepo, el jueves por la noche.
Las fuerzas sirias y palestinas entraron en el distrito y tomaron algunos bloques de edificios, cosa que ellos han hecho ya en varias ocasiones, antes de retirarse a la mañana siguiente.
Los combatientes de la Brigada de Al Quds llevaron una operación especial cerca de la Mezquita de Palestina el jueves por la noche, matando a un gran número de militantes allí, incluyendo a un comandante de Nureddin al Zinki, Abu Abdu Saruj,
El propósito de esta operación era vengar la muerte de un niño palestino, Abdulá al Isa, decapitado por los terroristas de Al Zinki en el Campo de Refugiados de Handarat. Muchos de los abatidos por la Brigada de Al Quds estuvieron presentes en la decapitación del niño.
Saruj estaba a cargo del grupo que mató al niño palestino de forma tan brutal. Él fue localizado por agentes de la Inteligencia siria, seguido y ejecutado en la mencionada operación, que tuvo lugar cinco días después de que otro terrorista que participó en el acto de decapitación del niño palestino fuera abatido en otra misión del Ejército sirio.
Un vídeo publicado la pasada semana por el grupo “moderado” y apoyado por EEUU, Nureddin al Zinki, arrestó, torturó y decapitó a un niño palestino de 12 años, al que acusó de cooperar con las fuerzas del Ejército sirio. Varios terroristas del grupo estuvieron implicados en el crimen, pero fue Saruj quien dio la orden.
Nureddin al Zinki está afiliado al Ejército Sirio Libre. Él ha recibido apoyo financiero de EEUU y ha utilizado también misiles antitanque TOW en el campo de batalla de Alepo.