Unos 7.000 militares con vehículos pesados han rodeado y bloqueado la base aérea de Incirlik utilizada por las fuerzas de la OTAN y que había restringido ya sus actividades.
Unos 7.000 militares con vehículos pesados han rodeado y bloqueado la base aérea de Incirlik utilizada por las fuerzas de la OTAN y que había restringido ya sus actividades tras el fracasado golpe de estado en Turquía. Los medios turcos señalaron que la base había quedado cercada por fuerzas militares.
Varias fotos muestran a grandes camiones entrando en la base aérea y a la policía turca cerrando la base poco después.
De este modo, militares turcos, apoyados por unidades blindadas, controlan a partir de ahora todas las vías de acceso a la base e impiden la circulación.
Rumores sugieren que estas unidades fueron desplegadas para detener un posible segundo golpe, pero esto no ha recibido confirmación hasta ahora.
La base alberga a un contingente estadounidense y es una importante base militar de la OTAN. Desde ella, las fuerzas de la coalición han lanzado ataques contra el EI en Siria e Iraq.
Sin embargo, los militares golpistas utilizaron la base como un punto de coordinación, lo que llevó al gobierno turco a cerrar temporalmente el sitio y arrestar al comandante de la base.
Erdogan, por otro lado, ha anunciado el cierre de todas las academias a partir del 30 de Julio.
Interrogado por el canal Habar Ay, el presidente turco afirmó que había tomado estas medidas “para imponer un mayor control civil al Ejército”.
“Una Universidad de Defensa Nacional reemplazará a las academias militares”, dijo el presidente.
Los países occidentales han denunciado “la purga llevada a cabo por Erdogan en el Ejército” tras el intento de golpe de estado el 15 de Julio.