George Galloway hizo un sorpresivo regreso al centro del escenario político al infligir una derrota aplastante a los laboristas en las elecciones legislativas parciales.

George Galloway, el político británico inconformista que ha sido particularmente conocido por su postura en contra de la guerra de Iraq, hizo un sorpresivo regreso al centro del escenario político al infligir una derrota aplastante a los laboristas en las elecciones legislativas parciales.

Galloway se presentó como candidato del partido Respect (Respecto), una formación de izquierda que cuenta con el apoyo de gran parte de la comunidad musulmana, al distrito oeste de Bradford. Galloway se unió a Respect después de su expulsión del Partido Laborista en 2003.

Contrariamente a las predicciones de las encuestas, él obtuvo en la noche del jueves el 56% de los votos derrotando así al candidato del Partido Laborista, Imran Hussain, que era favorito en este bastión del Partido Laborista, cuyo liderazgo ha sido criticado a menudo en los últimos meses. “Esta victoria es la más sensacional de todas las elecciones en el país”, dijo Galloway. Es un “levantamiento” que dará lugar a la “Primavera de Bradford.”

Galloway, de 57 años, fue expulsado del Partido Laborista después de manifestar su postura en contra de la participación británica en la invasión de Iraq, lo que le valió el apoyo de la comunidad musulmana.

También es conocido por su apoyo a los palestinos y por haber organizado en 2011 convoys de solidaridad con Gaza, que sufre el inhumano bloqueo de Israel desde junio de 2007. Él se opuso también a las sanciones económicas contra Iraq y se reunió con el ex dictador Saddam Hussein cuando fue expulsado de la comunidad internacional. Tras ser acusado de haber recibido sobornos en el marco del programa Petróleo por Alimentos de la ONU en Iraq, él saltó a la fama en 2005 al realizar su propia defensa ante el Senado de EEUU.

Aquella comparecencia le sirvió para denunciar la política de Washington y Londres hacia Iraq. “Me reuní con Saddam tantas veces como lo hizo el ex secretario de Defensa de EEUU, Donald Rumsfeld,” gritó Galloway. “La diferencia es que Donald Rumsfeld, se reunió con él para venderle armas... Todo lo que dije sobre Iraq resultó ser cierto y todo lo que EEUU ha dicho se ha demostrado que era falso. 100.000 personas han pagado con sus vidas, incluyendo 1.600 soldados estadounidenses (en aquel momento) enviados a la muerte sobre la base de una sarta de mentiras”, añadió.