Rusia podría responder a la nueva bomba nuclear estadounidense B61-12 con una ojiva nuclear diseñada para los misiles tácticos Iskander.

Rusia podría responder a la nueva bomba nuclear estadounidense B61-12 con una ojiva nuclear diseñada para los misiles tácticos Iskander, opina el presidente de la Academia de Problemas Geopolíticos, Konstantín Sivkov.

Según trascendió, la Administración Nacional de Seguridad Nuclear (NNSA) de los Estados Unidos dio luz verde al inicio de la fase de preproducción de la bomba nuclear modernizada B61-12.

EEUU estudia instalar estas bombas en aviones de su aviación táctica en Europa hacia principios de 2018.

"Rusia puede adoptar una sola contramedida: crear una ojiva nuclear para el sistema de misiles tácticos Iskander, que sería hoy la respuesta más eficaz", dijo Sivkov quien es Doctor en Ciencias Militares.

El experto comentó que la bomba B61-12 es una munición nuclear táctica con una precisión sin precedentes: su desvío del blanco designado no superará unos cuantos metros.

La nueva bomba estadounidense —señaló Sivkov— se utilizará para destruir puestos de mando subterráneos, situados a una gran profundidad y que pueden sucumbir solo ante un ataque selectivo con municiones de gran precisión.

"La producción de estas bombas ampliará las posibilidades de la aviación táctica de EEUU para destruir los centros de mando rusos más protegidos y de importancia estratégica", resumió el experto militar ruso.

Sputnik