Una delegación rusa de visita en Ankara ha pedido a los dirigentes turcos que cierren la frontera de Turquía con Siria, reveló el periódico ruso Izvestia, citando fuentes parlamentarias rusas.

Una delegación rusa de visita en Ankara ha pedido a los dirigentes turcos que cierren la frontera de Turquía con Siria, reveló el periódico ruso Izvestia, citando fuentes parlamentarias rusas.

“Naturalmente hemos planteado la cuestión del cierre de la frontera turco-siria para hacer cesar el influyo de terroristas y armas”, indicó el presidente de la Comisión de Defensa en la Duma rusa, Viktor Vodolaski. A cambio, prosiguió, Moscú podría suministrar a los turcos las fotos de satélite que muestran los pasos que se utilizan para el tráfico de armas y la infiltración de milicianos hacia Siria.

Según el medio ruso, Ankara está inclinada a aceptar la sugerencia rusa.

Diversos medios han dado a conocer recientemente la creación de una instancia ruso-turca que comprende a representantes militares, de los servicios de inteligencia y de las diplomacias de los dos países para buscar una solución a la crisis siria.

Un gran número de terroristas extranjeros que participaron en la ofensiva terrorista del pasado domingo contra el Suroeste de Alepo entró en Siria a través de la frontera turco-siria.

Putin y Erdogan, indicaron en su reciente encuentro de San Petersburgo que podrían trabajar juntos en relación a Siria, donde ellos han estado en campos opuestos hasta ahora.

Un día antes de la visita, Erdogan dijo a la agencia rusa Tass que la Federación rusa era el “principal actor para traer la paz a Siria”. “Creo que nosotros, Rusia y Turquía, deberíamos resolver este tema dando pasos juntos”.

Por su parte, Putin dijo que Rusia y Turquía tenían un objetivo común de resolver la crisis en Siria. Él manifestó que los dos estados no siempre coincidían, pero añadió que ambos habían accedido a discutir más y buscar soluciones. “Creo que es posible alinear nuestros nuestros enfoques y puntos de vista”.

Por su parte, George Friedman, antiguo jefe de la compañía de inteligencia privada norteamericana Stratford, dijo que los dirigentes occidentales están nerviosos por la aproximación de Turquía a Rusia. “Las esperanzas de que ellos (los turcos) nos ayudarían en Siria parece haberse evaporado como el humo”, señaló. “En el otro lado de la ecuación, estamos intentando contener a Rusia. Cuando los turcos derribaron el avión ruso esperábamos desarrollar una estrecha relación con Turquía de nuevo. Ahora, esa posibilidad se ha evaporado”.