El Consejo Político Supremo de Yemen, creado hace dos semanas mediante una alianza entre el movimiento Ansarulá y el Congreso Popular General, ha comenzado a trabajar en sus actividades.
Según el canal yemení Al Masirah, el Consejo Político Supremo de Yemen, creado hace dos semanas mediante una alianza entre el movimiento Ansarulá y el Congreso Popular General, liderado por el ex presidente Ali Abdulá Saleh, ha comenzado a trabajar en sus actividades, conforme a la Constitución de Yemen. Este Consejo está a cargo ahora de gobernar el país.
Se trata de una victoria real para el pueblo yemení, que se dota así de instituciones legítimas para dirigir la resistencia contra los agresores saudíes y sus aliados y mercenarios y para responder a las necesidades y demandas de los ciudadanos.
Por su parte, el Parlamento yemení ha anunciado la reanudación de sus actividades después de dos años de interrupción a partir del 13 de agosto de 2016.
Una de las recientes medidas del Parlamento ha sido la anulación del gobierno del presidente dimisionario y fugitivo Abed Rabbo Mansur Hadi, refugiado en Arabia Saudí, una medida anunciada el domingo por la tarde y que priva a aquel ejecutivo de cualquier valor legítimo o jurídico. Los delegados también aprobaron la entrada en funcionamiento y composición del Consejo Político Supremo y las recientes medidas adoptadas por el mismo.
Por lo tanto y en virtud de tal decisión, el poder será transferido desde el Comité Revolucionario Supremo a dicho Consejo en el que recaerán a partir de ahora los poderes ejecutivos en el campo político, militar, económico y social. La Asamblea ha demandado igualmente a otros grupos políticos y sociales que se unan a esta iniciativa, lejos de influencias o imposiciones extranjeras.
La creación del Consejo Político Supremo y la convocatoria del Parlamento constituyen un gran éxito político para el país y muestran la influencia política predominante que el movimiento Ansarulá y el Congreso Popular General detentan.