EEUU ha ordenado a sus militares que retiren secretamente las armas nucleares norteamericanas del territorio turco, y más precisamente de la base de Incirlik, en los plazos más breves posibles.
EEUU ha ordenado a sus militares que retiren secretamente las armas nucleares norteamericanas del territorio turco, y más precisamente de la base de Incirlik, en los plazos más breves posibles.
“Los estadounidenses han comenzado a retirar sus armas nucleares de Turquía”, anunció el periódico EurActiv, refiriéndose a fuentes próximas a este tema.
El medio precisa que la razón de esta medida es que EEUU ya no confía en el gobierno de Erdogan. “Washington no tiene la suficiente confianza en Ankara para dejar estas bombas en el territorio turco”, señala EurActiv.
Según el periódico, EEUU cuenta con transferir estas ojivas nucleares hacia la base rumana de Deveselu. En esta base el 12 de mayo, EEUU activó su sistema de defensa antimisil a pesar de las protestas de Moscú.
EEUU había estacionado entre 50-70 armas nucleares tácticas B61 en búnkeres subterráneos de la base. Aviones norteamericanos efectúan ataques desde esta instalación contra objetivos del EI en Siria e Iraq.
Tras el intento de golpe de estado, el gobierno turco ha prohibido a los pilotos de EEUU despegar desde esta base y ha arrestado a su jefe por implicación en el intento de golpe. La base estuvo prácticamente cercada en el mes que ha transcurrido desde el golpe.
Según algunas fuentes, Turquía pidió a EEUU asumir el control del arsenal nuclear de la base, pero EEUU rechazó tal demanda.
Posible presencia rusa en Incirlik
EEUU se habría alarmado además con la noticia de que Turquía podría dar acceso a los rusos a la base para llevar a cabo desde ella ataques en Siria tras la aproximación de ambos países.
Un diputado del Parlamento ruso, Igor Morozov, sugirió que el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, podría ofrecer el uso de la base a Rusia. “Turquía podría proporcionar el uso de la base de Incirlik a Rusia para operaciones antiterroristas en Siria. Esto parece una continuación lógica de la aproximación del presidente turco, Erdogan, a Rusia”, dijo Morozov.
El senador Viktor Ozerov, miembro del Comité de Seguridad y Defensa, también sugirió que el uso de la base de Incirlik sería “un gesto que mostraría el estrechamiento de vínculos entre los dos países”.
La perspectiva de una posible presencia de los rusos a pocos metros de sus armas nucleares habría llevado a Washington a proceder a la rápida retirada de aquellas.