Los enfrentamientos entre Turquía y las fuerzas kurdas apoyadas por EEUU en Siria son “inaceptables”, anunció el Pentágono norteamericano el lunes, llamando a todas las partes a “cesar” los comb
Los enfrentamientos entre Turquía y las fuerzas kurdas apoyadas por EEUU en Siria son “inaceptables”, anunció el Pentágono norteamericano el lunes, llamando a todas las partes a “cesar” los combates. Esta declaración vino en un momento en el que ha sido lanzada una resistencia kurda contra la presencia turca en el norte de Siria, a la que se califica de “ocupación”.
“Seguimos de cerca las informaciones que hablan de combates entre las Fuerzas Armadas turcas, grupos de la oposición (pro-Ankara) y unidades afiliadas a las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS)”, anunció el Pentágono en un comunicado obtenido por AFP el lunes. Se refería a las FDS, una milicia apoyada por Washington e integrada en su mayor parte por las Unidades de Protección del Pueblo Kurdo (YPG), así como por milicianos árabes.
Los combates entre el Ejército turco y las milicias kurdas se concentran en la ciudad siria de Yarabulus, tomada el miércoles pasado por las milicias pro-Ankara, concretamente el llamado Ejército Sirio Libre. El co-presidente de las FDS, Ilham Ahmad, se ha quejado de la presencia en Yarabulus de 50 vehículos blindados turcos.
El lunes, las milicias apoyadas por Turquía, se apoderaron de 12 pueblos controlados por las FDS en el norte de la provincia de Alepo. En total, los kurdos han perdido a 150 hombres y los turcos y sus aliados a 60.
Según las fuentes kurdas, 37 civiles perecieron por bombardeos de aviones turcos contra zonas residenciales. “Al menos 37 mártires en el balance de las masacres perpetradas en Srisate y Bir al Kusa. La cifra podría incrementarse porque hay personas gravemente heridas”.
Algunas fuentes señalan que, tras el estallido de los combates, Turquía ha desplegado su fuerza aérea y más tanques, que serían ahora unos 50, para llevar a cabo no una operación, sino una guerra abierta contra una milicia kurda formada por unos 35.000 hombres. Las fuerzas turcas han penetrado hasta 17 kms de profundidad en el norte de Siria en una franja de 100 kms.
Resistencia a la ocupación turca
Frente a esta ofensiva, las FDS han lanzado el proyecto de la “Resistencia kurdo-siria contra la ocupación turca”.
Contradiciendo las declaraciones norteamericanas, según las cuales las FDS iban a lanzar un asalto contra el feudo del EI en Raqqa, un portavoz del grupo dijo que “Raqqa ya no está en el programa del FDS actualmente”, aseguró uno de sus dirigentes al periódico libanés As Safir.
“Es una resistencia siria formada en su mayoría por un componente kurdo. Sin embargo, ella comprende también algunos grupos árabes”, dijo Rizan Heddo, miembro del Consejo de una Siria Democrática, la rama política del FDS.
Interrogado sobre los hechos de Hassaka, donde las milicias abrieron fuego contra soldados sirios e intentaron expulsarle de los barrios que controlan en la ciudad, Heddo reconoció que había sido “un grave error”.
“El Ejército sirio y las unidades kurdas son las únicas fuerzas sirias que combaten realmente el terrorismo”, añadió.
Él precisó, sin embargo, que hasta el presente ningún contacto ha sido iniciado por las FDS en dirección a Damasco.
Turquía exige a las milicias que se retiren al este del Éufrates
Por su parte, Turquía ha señalado que sus soldados continuarán atacando a los combatientes kurdos en el norte hasta que se hayan retirado al este del Éufrates, dijo el lunes el ministro de Exteriores.
“Las YPG, como EEUU ha prometido y ellas mismas han declarado, deben retirarse al este del Éufrates lo antes posible y en tanto no lo hagan continuarán siendo un blanco”, dijo Mevlüt Cavusoglu durante una rueda de prensa con su homólogo holandés, Bert Koenders.
Mientras portavoces del Pentágono insisten en que los kurdos se están retirando al este del Río Éufrates, no parece haber confirmación de los propios kurdos y el portavoz de las YPG, Redur Xelil, dijo que Turquía se enfrentará a problemas si ataca la ciudad de Manbij.
Varios medios han señalado que las YPG están enviado refuerzos a Manbij, capturada a principios de este mes por los kurdos, y fortificándola.
Un comandante de la Brigada Sultan Murad, apoyada por Turquía, afirmó que su grupo estaba preparado para atacar dicha ciudad. Existen también información de que tanques turcos se dirigen hacia ella.
“Al ocupar Yarabulus, Turquía no trata de luchar contra el EI, sino ayudar al grupo terrorista, e impedir que nuestras fuerzas continúen sus operaciones contra él”, añadió Xelil, en declaraciones a la agencia ARA News.
El responsable kurdo también acusó a Turquía de haber ganado millones de dólares debido al comercio de petróleo con el EI en el pasado a través del punto fronterizo de Tal Abyad. “Al menos 30 millones de dólares mensuales”, dijo.
La ciudad de Manjib fue liberada recientemente por las FDS del EI después de una batalla de más de dos meses.
Protestas anti-turcas en Kobani
En la ciudad de Kobani, en el norte de Siria, fuerzas militares turcas han penetrado unos 20 metros en la ciudad, pese a que ésta se halla al este del Río Éufrates. Fuerzas turcas han afirmado que el propósito de esta incursión es el de permitir a las tropas construir un muro a lo largo de la frontera.
En respuesta, cientos de kurdos de esta ciudad, controlada por el YPG, salieron para protestar contra esta acción del Ejército turco.
Algunos se plantean si Turquía aprovechará la construcción el muro para anexionarse territorio sirio.