El ministro turco de Temas de la Unión Europea, Omer Celik, ha excluido cualquier tregua con las milicias kurdas del YPG afirmando que Turquía es un “estado soberano”.
El ministro turco de Temas de la Unión Europea, Omer Celik, ha excluido cualquier tregua con las milicias kurdas del YPG afirmando que Turquía es un “estado soberano” y que es imposible que ellos firmen un acuerdo con una “organización terrorista”, como Ankara considera a las YPG. Los militantes sirios aliados con Turquía afirmaron también que los ataques contra los kurdos se reanudarán pronto.
Por su parte, el primer ministro Binali Yildirim, dijo que “las operaciones continuarán hasta que todas las amenazas a los ciudadanos turcos hayan sido eliminadas. Con independencia de las declaraciones realizadas, la situación es clara: El PKK, PYD, YPG son todos los mismo y dañan a Turquía. Estamos determinados en nuestra posición”.
Los responsables turcos indican que el objetivo de su operación en el norte de Siria es el de “limpiar” una franja de territorio de 90 kms del norte de Siria situado a lo largo de la frontera con Turquía y obligar a las milias kurdas a retirarse al este del Río Éufrates.
La declaración turca desmiente así las afirmaciones de EEUU de que las fuerzas turcas habían alcanzado una “pausa temporal” con los kurdos del norte de Siria. El coronel John Thomas, del Mando Central de EEUU, dijo a AFP que “es un frágil acuerdo suscrito para los próximos dos días y esperamos que luego se consolide”.
Por su parte, el portavoz del presidente turco, Ibrahim Kalin, dijo que “EEUU debe revisar su política de apoyo a las fuerzas kurdas”.
Desde el punto de vista militar, el Ejército turco y las fuerzas kurdas se están alineando para librar una batalla decisiva por Manbij, que determinará el resultado de la invasión turca del norte de Siria. Las milicias kurdas confían en detener al Ejército turco a las puertas de la ciudad convirtiendo así la intervención turca en un fiasco.
Las YPG ha señalado que han destruido tres tanques del Ejército turco en el norte de Alepo, el último de ellos en las pasadas 24 horas en el lado oeste de la ciudad de Yarabulus.