La Sexta Cumbre de las Américas ha concluido sin una declaración conjunta debido a la falta de consenso sobre algunos temas polémicos como la participación de Cuba en este tipo de cumbres y las Islas Malvinas.
La Sexta Cumbre de las Américas ha concluido sin una declaración conjunta debido a la falta de consenso sobre algunos temas polémicos como la participación de Cuba en este tipo de cumbres y las Islas Malvinas.
“No hay ninguna declaración final porque no hay consenso”, dijo el presidente colombiano, Juan Manuel Santos, en una conferencia de prensa de cierre el lunes.
Los líderes de los 31 países del Hemisferio Occidental participaron en la cumbre de dos días, celebrada en la ciudad colombiana de Cartagena.
La mayoría de los líderes latinoamericanos que asistieron a la cumbre pidieron la eliminación del veto de EEUU contra la participación de Cuba en estas cumbres. EEUU y Canadá, sin embargo, se opusieron a esta demanda.
EEUU afirmó en 1959 que los líderes cubanos no cumplían los requisitos de la Carta de la Organización de Estados Americanos (OEA).
Sólo los miembros de la OEA reciben invitaciones para participar en las cumbres de las Américas, y el veto de EEUU a la pertenencia de Cuba a la OEA impide efectivamente a la nación caribeña participar en dichas reuniones.
Santos criticó la política de EEUU de “aislamiento” y “embargo” contra Cuba y la calificó de “anacronismo que nos mantiene anclados en una época superada de la Guerra Fría”.
Venezuela, Argentina y Uruguay dijeron que no iban a firmar ninguna declaración si EEUU y Canadá no retiraban su veto. Cabe señalar que Ecuador y Nicaragua boicotearon la cumbre debido a este tema.
La Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América, un bloque de ocho países de América Latina y el Caribe, dijo el sábado que boicoteará cualquier futura cumbre de las Américas a menos que se conceda a Cuba el derecho incondicional a participar en la reunión.
EEUU y Canadá también se negaron a apoyar la reclamación de Argentina sobre las Islas Malvinas, en poder del Reino Unido. La presidenta argentina, Cristina Fernández, abandonó con tal motivo la cumbre antes de la ceremonia oficial de clausura.
Las Islas Malvinas, situadas a unos 300 kilómetros de la costa de Argentina y hogar de unos 3.000 habitantes, la mayoría de origen británico, han sido declaradas como parte de los Territorios Británicos de Ultramar desde que el Reino Unido estableció su dominio colonial sobre las islas en 1833.
Argentina, sin embargo, ha rechazado repetidamente la pretensión británica sobre el archipiélago y reclama su devolución.