La Unión Europea ha condenado el anuncio de Israel de que se dispone a legalizar tres asentamientos ilegales en la Cisjordania palestina ocupada y ha pedido al régimen de Tel Aviv que dé marcha atrás en esa decisión.
La Unión Europea (UE) ha condenado el anuncio de Israel de que se dispone a “legalizar” tres asentamientos ilegales en la Cisjordania palestina ocupada y ha pedido al régimen de Tel Aviv que dé marcha atrás en esa decisión.
“Estoy extremadamente preocupada por la decisión de las autoridades israelíes sobre los asentamientos de Sansana, Rachalim y Bruchin en el territorio palestino ocupado de Cisjordania”, dijo la jefa de Política Exterior de la UE, Catherine Ashton, a AFP el miércoles.
“Hago un llamamiento (a los dirigentes israelíes) para que reconsideren tal decisión”, agregó Ashton.
Ella señaló que “los asentamientos son ilegales según el Derecho Internacional y un obstáculo para la paz, y también amenazan la viabilidad de una solución de dos estados”.
La oficina del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, anunció el martes la “legalización” de los puestos de avanzada de Bruchin y Rechelim, en el norte de Cisjordania, y Sansana, en la parte sur del territorio palestino ocupado.
La declaración de la UE es la última de una serie de condenas internacionales contra la decisión del régimen israelí.
El martes, el secretario general Ban Ki-moon criticó la decisión de Tel Aviv, diciendo que estaba “profundamente preocupado” por la ilegal medida.
El jefe de la ONU señaló que el régimen israelí tiene la obligación internacional de abstenerse de “provocaciones” como la construcción de nuevos asentamientos ilegales en los territorios ocupados.
El principal aliado de Israel, EEUU, afirmó estar preocupado también por la decisión. La portavoz del Departamento de Estado, Victoria Nuland, dijo que Washington estaba buscando una aclaración por parte del gobierno israelí, y reiteró la oposición de EEUU a la actividad en los asentamientos.
El ministro de Exteriores alemán, Guido Westerwelle, también criticó la acción israelí, diciendo que Berlín había “presionado a la parte israelí en los últimos días para que esto no ocurriera.”
La organización pacifista israelí, Paz Ahora, criticó asimismo al gobierno israelí por su “legalización” de los puestos de avanzada.
“Ésta es la primera vez desde 1990 que el gobierno de Israel decide legalizar nuevos asentamientos, y la maniobra del gobierno de establecer un comité para crear estos asentamientos es un truco destinado a ocultar su verdadera política al público”, dijo Hagit Ofran.
Alrededor de 350 colonos israelíes residen actualmente en Bruchin, mientras que unos 240 colonos viven en Rechelim. Sansana, que se encuentra cerca de la ciudad de Al Jalil (Hebrón), es también el hogar de cerca de 240 colonos.
Los puestos de avanzada son asentamientos israelíes más nuevos y más pequeños y el gobierno israelí considera que aquellos que fueron construidos sin su autorización son ilegales.
Sin embargo, la comunidad internacional considera que todos los asentamientos israelíes en Cisjordania son ilegales según el Derecho Internacional, ya estén autorizados por el régimen de Tel Aviv o no.
El 22 de febrero, Israel aprobó la construcción de 500 nuevas unidades ilegales en el asentamiento de Shilo y también legalizó más de 200 casas construidas en otras partes de Cisjordania sin permiso del gobierno israelí.
Cerca de 500.000 colonos viven en más de 100 asentamientos construidos desde la ocupación israelí de los territorios palestinos de Cisjordania y Jerusalén Este (Al Quds) en 1967 y su número se está incrementando.
