La Casa Blanca ha condenado los atentados del jueves en Damasco, que han causado más de 50 muertes, y manifestado que estos actos no eran representativos de la lucha de oposición al presidente Bashar al Assad.
La Casa Blanca ha condenado los atentados del jueves en Damasco, que han causado más de 50 muertes, y manifestado que estos actos no eran representativos de la lucha de oposición al presidente Bashar al Assad.
“Ataques como esos, que matan e hieren de forma indiscriminada a civiles son condenables y no pueden ser justificados,” estimó el portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney. “Ellos nos recuerdan la urgencia que existe de encontrar una solución política antes de que sea demasiado tarde”.
“No creemos que el tipo de ataques que hemos presenciado en Damasco sea representativo de la oposición. Está claro que elementos extremistas están actuando en Siria, como siempre hemos dicho, y tratan de sacar provecho del caos en este país, causado por los ataques brutales de Assad contra su propio pueblo”, dijo Jay Carney a bordo del Air Force One, el avión presidencial.
Por su parte, el jefe del Pentágono, Leon Panetta, dijo que los ataques de Damasco llevaban la huella de Al Qaida y recordaban los ataques terroristas en Iraq.
Según Panetta, los miembros de Al Qaida han comenzado a refugiarse en Siria, aprovechando el caos reinante en el país.
Panetta y el Jefe del Estado Mayor Conjunto de EEUU, general Martin Dempsey, también han descartado una intervención militar en Siria.