Rusia dijo que una nueva masacre en Siria, en la cual fallecieron al menos 55 civiles, según algunos informes, fue una provocación destinada a socavar el plan de paz del enviado Kofi Annan.
Rusia dijo que una nueva masacre en Siria, en la cual fallecieron al menos 55 civiles, según algunos informes, fue una provocación destinada a socavar el plan de paz del enviado de las Naciones Unidas y la Liga Árabe, Kofi Annan.
“No hay duda de que ciertas fuerzas, y no por primera vez, utilizan las provocaciones más brutales y viles para socavar el plan de Kofi Annan”, dijo el portavoz de la cancillería rusa, Alexander Lukashevich, el jueves.
Él se refería así a la última ola de violencia en Hama en unos comentarios televisados que realizó durante una rueda de prensa.
Milicianos armados con pistolas y cuchillos atacaron la aldea de Al-Kubeir, en el centro de Siria, el miércoles, matando a por lo menos 55 personas, entre ellas mujeres y niños. Los residentes allí pidieron a las fuerzas de seguridad sirias que entraran en el pueblo para ayudarles y dos de sus miembros fueron abatidos.
“En la situación actual, muy difícil, la respuesta a estas provocaciones debe ser la consolidación de los esfuerzos de la comunidad internacional para apoyar el (plan de Annan) ... y la firma y la aplicación completa por parte del gobierno sirio y la oposición de todos los puntos del plan de Annan”, dijo Lukashevich.
“Resulta imperativo que los países extranjeros que participan en la solución del problema sirio hagan uso de sus canales para influir en los grupos armados de oposición, que han incrementado sus actividades recientemente y piden la intervención externa en contradicción con este plan”, agregó. “Esto ayudará a evitar una repetición de las tragedias de Houla y Hama.”