Washington está profundamente preocupado por los informes de una lucha de poder en Arabia Saudí, debido a las enfermedades y el envejecimiento de los líderes del reino.
Washington está profundamente preocupado por los informes de una lucha de poder en Arabia Saudí, debido a las enfermedades y el envejecimiento de los líderes del reino, incluyendo el rey, el príncipe heredero y el ministro de Relaciones Exteriores.
Los medios dicen que una serie de responsables políticos y de seguridad de alto rango estadounidenses han visitado recientemente Riad para seguir los acontecimientos políticos en el país.
El rey de Arabia Saudí, el rey Abdulá, de 87 años, y el príncipe Nayef bin Abdul Aziz al Saud, de 79 años, sufren ambos una mala salud. Los ministerios clave y los puestos de seguridad también están ocupados por los hijos del fundador del reino, el rey Abdul Aziz, todos los cuales tienen más de 70 ó 80 años y sufren problemas de salud.
Se cree que el ministro de Relaciones Exteriores Saud Al Faisal, el director general de la agencia de inteligencia (Al Estejbarat al Aamah) Muqrin bin Abdul Aziz y el presidente del Consejo de Seguridad Nacional Bandar bin Sultan están dirigiendo el país.
Nayef se encuentra actualmente en Suiza para realizar pruebas médicas. Se cree que éste último, que también es el ministro del Interior, sufre una enfermedad a los huesos, diabetes y cáncer.
El rey Abdulá también ha sufrido varias intervenciones quirúrgicas en los últimos años.
La avanzada edad y el delicado estado de salud del rey Abdulá y sus medios hermanos en la línea de sucesión han causado una preocupación sobre el futuro del país, rico en petróleo, máxime cuando continúan las protestas anti-gubernamentales a pesar de la continua represión del régimen.