Rusia e Irán mantienen una posición muy cercana con respecto a Siria, dijo el ministro de Exteriores ruso, Serguei Lavrov, durante una visita el miércoles a Teherán.
Rusia e Irán mantienen una posición “muy cercana” con respecto a Siria, dijo el ministro de Exteriores ruso, Serguei Lavrov, durante una visita el miércoles a Teherán.
Lavrov y su homólogo iraní, Ali Akbar Salehi, manifestaron después de sus conversaciones que las posiciones de Rusia e Irán sobre Siria eran “muy cercanas”, en particular la necesidad de aplicar el plan del enviado internacional, Kofi Annan, y de resolver la crisis mediante negociaciones entre el régimen y la oposición sin intervención externa.
Moscú no entrega de armas que puedan utilizarse contra manifestantes
En referencia a los llamamientos de EEUU que piden el cese del suministro de armas a Damasco, Lavrov dijo que su país “no entregará a Siria o a cualquier otro cosas que puedan utilizarse en la lucha contra manifestantes pacíficos, a diferencia de EEUU que sí entrega de forma regular equipos especiales para tal fin a varios países de la región”.
“Una entrega de este tipo ha tenido lugar recientemente a un país del Golfo Pérsico, pero los estadounidenses consideran que es normal”, añadió.
Conferencia Internacional sobre Siria
Lavrov también dijo que 15 países, a los que no identificó, ya habían accedido a participar en la conferencia internacional que Moscú ha decidido convocar para solicitar la ejecución del plan Annan.
Rusia espera que esta conferencia reúna a los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU (EEUU, Rusia, China, Francia y Reino Unido), a los países de la Liga Árabe y a los vecinos de Siria.
Irán ha apoyado la celebración de una conferencia sobre Siria a la que ha sido invitado, a pesar de las reservas de algunos países occidentales y árabes.
Sin embargo, Moscú cree que Teherán es capaz de “ejercer una presión constructiva sobre Siria”.
Optimismo en el resultado final de las conversaciones de Moscú
Salehi y Lavrov también discutieron la cuestión nuclear iraní antes de una nueva ronda de conversaciones entre Irán y las principales potencias, que está programada para el 18 y 19 de junio en la capital rusa.
Lavrov dijo que Irán quería “encontrar soluciones” a la crisis, sin entrar en detalles.
“El tema es complejo y hay que tener paciencia (...) pero somos optimistas sobre el resultado” de la reunión de Moscú, dijo Salehi.
Las autoridades iraníes siempre han dicho que no aceptarían ninguna limitación en lo que creen son sus “derechos” nucleares, pero han sugerido que Irán podría reducir voluntariamente el enriquecimiento de uranio si sus derechos son reconocidos y se levantan las sanciones.