El fiscal general de Egipto, Abdel Maguid Mahmud, negó el jueves las informaciones que afirmaban que el ex presidente egipcio Hosni Mubarak y su familia hubieran salido del país en dirección a Arabia Saudí.
El fiscal general de Egipto, Abdel Maguid Mahmud, negó el jueves las informaciones que afirmaban que el ex presidente egipcio Hosni Mubarak, derrocado por una revolución popular, y su familia hubieran salido del país en dirección a Arabia Saudí e insistió en que ellos estaban todavía en la localidad egipcia de Sharm el Sheij, junto al Mar Rojo.
Su portavoz, Adel al Said, añadió que la Oficina del Fiscal había recibido el miércoles algunos papeles legales firmados por el presidente en su residencia de la mencionada localidad.
El diario estatal Al Ajbar dijo ese día que Mubarak iba a recibir un tratamiento médico para el cáncer en Arabia Saudí, citando “fuentes bien informadas”. El diario dijo que Mubarak, su esposa y dos hijos se encontraban en una base militar en la ciudad de Tabuk, en el noreste de Arabia Sauí, no lejos de Sharm el Sheij, donde el ex presidente de 82 años ha estado residiendo desde su salida forzada del poder el pasado 11 de febrero.
Las autoridades egipcias decretaron el pasado lunes una prohibición para que Mubarak y su familia salgan del país y también impusieron una congelación de sus bienes.
Entretanto, la CNN informó de que Mubarak será llevado a El Cairo la próxima semana para ser interrogado por los cargos de corrupción, según un activista anti-corrupción. Los documentos del caso han revelado que la familia de Mubarak posee el equivalente a 150 millones de dólares en cuentas bancarias secretas.
El anuncio del próximo interrogatorio de Mubarak se produjo horas después de que el primer ministro de Egipto, Ahmed Shafiq, dimitiera y un antiguo ministro de Transporte fuera escogido para dirigir un nuevo gobierno, respondiendo así a las demandas de activistas pro-democráticos de expulsar a todos los miembros de la vieja guardia de Mubarak del gabinete.
Los gobernantes militares señalaron que ellos habían aceptado la dimisión de Shafiq y nombrado en su lugar a Issam Shafar. Shafiq fue nombrado por Mubarak en los días finales de su estancia en el poder, del que fue expulsado por una revolución popular de 18 días que conmocionó Oriente Medio y el mundo.