La entidad sionista ha iniciado una ardua campaña diplomática contra Irán en las capitales del mundo para intentar hacer fracasar la cumbre del MNA que se celebrará en Teherán a finales de este mes.
La entidad sionista ha iniciado una ardua campaña diplomática contra Irán en las capitales del mundo para intentar hacer fracasar la cumbre del Movimiento de los No Alineados (MNA) que se celebrará en Teherán a finales de este mes.
Según el diario israelí Maariv, el Ministerio de Relaciones Exteriores israelí ha enviado cables a todas las misiones diplomáticas de Israel en el exterior con instrucciones para intentar disuadir a los estados de Europa Central, Asia y América del Sur para que no asistan a la próxima Cumbre de los No Alineados.
Según la misma fuente, “Israel considera que esta cumbre es un intento iraní de romper el aislamiento internacional que se le impuso debido a la continuación de su programa nuclear.”
Según Maariv, “Israel está trabajando principalmente en países como Egipto, India o Corea del Sur para que no envíen a sus representantes a la cumbre en cuestión, o al menos reduzcan el nivel de representación y no envíen a sus jefes de Estado”.
El periódico israelí señaló que “Irán quiere que se apruebe una cláusula especial en la declaración final en la que se reconozca la legitimidad de los países en desarrollo para adquirir capacidad nuclear y del enriquecimiento de uranio.”
Por último, según fuentes políticas, citadas por Maariv y que participan en esta campaña, “Israel intenta convencer a estados occidentales importantes y a sus amigos en la región para que no permitan a Irán beneficiarse de esta cumbre.”