Las transacciones entre China y Venezuela están experimentando un fuerte incremento en un momento en el que China busca abrir y mantener sus mercados en América Latina.
Las transacciones entre China y Venezuela están experimentando un fuerte incremento en un momento en el que China busca abrir y mantener sus mercados en América Latina.
Los vínculos comerciales entre Caracas y Beijing se han incrementado después de que el presidente venezolano, Hugo Chávez, visitó China en 2004 para firmar lucrativos acuerdos energéticos con el presidente chino Hu Jintao.
En abril de 2010, Venezuela utilizó 20.000 millones de fondos chinos para financiar proyectos de desarrollo en los campos de la energía, la agricultura y la tecnología, señaló el jueves un corresponsal de Press TV.
“China va a proporcionar financiación a Venezuela... a largo plazo y en un volumen de unos 20.000 millones de dólares,” dijo Chávez en la ceremonia de firma con responsables chinos en abril de 2010.
El préstamo de 10 años está siendo pagado con el envío de 200.000 barriles de petróleo al día y la transferencia de fondos con condiciones preferenciales.
Además, la compañía estatal de petróleo de Venezuela, PDVSA, y la Compañía Nacional de Petróleo de China han firmado un acuerdo por valor de 16.300 millones de dólares para incrementar las exportaciones de petróleo venezolano a China hasta en un millón de barriles al día hacia el año 2012.
“China tiene un enorme mercado potencial. El presidente Chávez decidió diversificar el mercado exterior del país con el fin de reducir su dependencia de EEUU”, dijo Rafael Antolino, profesor de la Universidad Bolivariana.
La crisis financiera global, que ha provocado una reducción de las exportaciones chinas a Europa y América del Norte, ha llevado a Pekín a abrir y mantener mercados en América Latina.
Caracas y Pekín mantienen también una extensa cooperación en el campo de la tecnología de las comunicaciones. El lanzamiento de un satélite Simon Bolivar, construido en China, supuso un punto de inflexión para Venezuela en sus esfuerzos para conseguir la independencia en el sector de las telecomunicaciones.
En la actualidad, Venezuela envía a China 460.000 barriles de petróleo al día para devolver un préstamo de 8.000 millones de dólares que ha servido para financiar proyectos de infraestructuras en el país latinoamericano.