Ottawa confirmó el jueves su decisión de enviar a EEUU a una militar estadounidense que huyó a Canadá después de desertar en el 2007 para no regresar a Iraq, anunció una organización pacifista que la apoya.
Ottawa confirmó el jueves su decisión de enviar a EEUU a una militar estadounidense que huyó a Canadá después de desertar en el 2007 para no regresar a Iraq, anunció una organización pacifista que la apoya.
Confirmando una decisión inicial de enero de 2009, el Departamento de Inmigración y Ciudadanía ha ordenado que Kimberley Rivera, madre de cuatro niños pequeños y con residencia en Toronto, abandone el país para el 20 de septiembre, dijo la asociación Campaña de Apoyo a los Resistentes a la Guerra.
“Estamos muy preocupados por el hecho de que los opositores a la guerra, como Kim, no hayan tenido la oportunidad de expresar su posición”, dijo a la AFP un portavoz de la organización, Michelle Robidoux.
Según esta última, Kimberley Rivera se enfrenta a una pena de prisión si regresa a su país. Sus abogados están estudiando la posibilidad de una apelación.
Reservista desde el año 2001, Rivera fue enviada a Bagdad en 2006, donde fue asignada para proteger una base de las fuerzas de EEUU. En enero de 2007, mientras gozaba de un permiso de unos días, huyó a Canadá con sus dos hijas para no regresar a Iraq.
Desde entonces, ha tenido otros dos hijos que tienen la ciudadanía canadiense.
Según la asociación que apoya, ella es la primer militar de EEUU que halló refugio en Canadá después de huir de la guerra de Iraq.
Unos 200 desertores estadounidenses viven actualmente en Canadá, algunos de ellos en la clandestinidad.